“¡Óiganme bien!”      

Ana Abad

OPINIÓN│

Vivimos bajo un Gobierno no apto para cardíacos… Pasamos del estado del miedo y del pánico entre las fake news y el confuso manejo de los datos “oficiales” al desconcierto de escuchar a las autoridades locales que no cuentan con la información esencial para tomar decisiones y la creciente presión de los grupos de poder económico que piden retomar las actividades productivas bajo la promesa de tomar todas las medidas de bioseguridad. Las pocas “apariciones” del señor Presidente, en cadena nacional, no han ayudado para nada a mejorar la credibilidad de un Gobierno débil y con demasiados pendientes políticos no resueltos; en su última comparecencia desperdició, nuevamente, una valiosa oportunidad para reivindicar su liderazgo presentándose como un enojado padre de familia: “¡Óiganme bien!”, en un falso e inoportuno intento de mostrar su autoridad que no hizo más que incrementar la desconfianza sobre la forma en que está enfrentando esta dramática crisis, así como alrededor de las cifras oficiales; situación que constituye, sin duda, de extrema peligrosidad para la sociedad ecuatoriana. (O)