Pocos locales reabren en el mercado El Arenal

Decenas de comerciantes informales ayer llegaron para trabajar en el mercado El Arenal. PSR

Doce galletas un dólar” repetía Juan Zumba, en voz alta. Junto a él Zoila Bueno gritaba “seis papeles higiénicos en un dólar”; y a menos de un metro de ella Rosendo Tacuri ofrecía gel desinfectante en fundas a 50 y 25 centavos.

A paso lento recorrían una y otra vez la calle Roberto Crespo Ordónez, que está justo detrás del mercado El Arenal, que ayer se reabrió luego de permanecer cerrado desde el 6 de abril por prevención ante el coronavirus o CoVid19.

Miembros de las Fuerzas Armadas (FF.AA) están a cargo del control de los acceso a El Arenal. PSR

Los tres son comerciantes informales: Zumba vive en Quinta Chica; Bueno en Miraflores y Tacuri en Las Orquídeas. Aunque ninguno se conoce comparten una misma necesidad: llegar a casa con algo de comer para sus hijos.

Ellos son comerciantes informales y estaban casi un mes sin poder trabajar en este centro de abasto, que es el más grande de esta ciudad, porque el Municipio de Cuenca decidió cerrarlo temporalmente para una desinfección.

Para ellos la distancia social, es decir, los dos metros entre persona y persona, que se recomienda para prevenir contagios, no es un requisito fácil, pues tienen que necesariamente acercarse a los transeúntes para ofrecerles sus productos.

Ninguno de ellos pudo ingresar al mercado porque todo el contorno fue cercado con una malla metálica, y los únicos tres accesos estuvieron vigilados por miembros de las Fuerzas Armadas (FF.AA.) y Policía Nacional.

Esta fue la misma realidad para decenas de vendedores ambulantes que tuvieron que vender su mercadería en las cercanías porque tampoco lograron entrar debido a los fuertes controles.

Aunque el anuncio de la municipalidad fue que desde ayer se reactivaban las actividades en este mercado, esto se cumplió a medias, pues únicamente atendieron abacerías y locales de cárnicos.

El mercado El Arenal se reabrió con puestos de abacerías y cárnicos. La reapertura fue mínima. PSR

Los clientes comenzaron a ingresar a las 08:00 y se encontraron que en algunos pasillos estaban pintadas flechas blancas sobre el suelo para guiarlos y evitar aglomeraciones. Fue uno de los pocos cambios.

La mayor parte de locales estuvo cerrado y algunos comerciantes llegaron únicamente para limpiar y acomodar sus puestos. Este fue el caso de Blanca Loja, quien vendía vegetales, legumbres y frutas.

Ella contó que ahora tendrán que cambiar sus puestos y colocarse a una mayor distancia uno de otro, pero cree que para que los usuarios también colaboren con esto tiene que haber estrictos controles.

Esta semana esperamos volver a retomar nuestro trabajo, necesitamos trabajar, tenemos que mantener a nuestras familias y si tomamos todas las precauciones creo que podremos laborar tranquilamente…”, dijo.

Este mercado hasta antes de su cierre provisional congregaba a un promedio de 5.000 comerciantes, pero ahora la capacidad será para máximo unos 2.000 entre mayoristas y minoristas, esto como una medida de prevención.

Asimismo se colocaron túneles de sanitización en los ingresos y personal municipal recorrió adentro y afuera con altavoces para advertir la obligación del uso de la mascarilla y guantes.

Con la reactivación de este mercado ayer regresaron los estibadores y personas que ofrecen transporte de carga en carretillas. Asimismo algunas veredas volvieron a convertirse en lugar para el descanso de alcohólicos y mendigos.

Como ejemplo de organización ha sido tomado el mercado que está en la plataforma de Miraflores. PSR.

Para María Tenorio, quien llegó con su hija para abastecerse de mariscos, legumbres, cebolla y tomate, la reapertura no fue como lo espera, pues solamente pudo comprar pollo, arroz y granos secos.

Algo similiar le sucedió a Marco Saquinaula, quien tenía previsto adquirir verduras y frutos cítricos para preparar ensaladas para su local de comida vegetariana. No los encontró y decidió ir a otro mercado. (CSM)-(I)