Coronavirus “asfixia” a los zoológicos de Cuenca

Amaru analiza opción de devolver animales silvestres al Estado

En el zoológico Amaru están más de 1.350 animales de diferentes especies. Según sus administradores, requieren alrededor de 40.000 dólares mensuales para su operación.

Yurak Allpa espera mantenerse este año por la difícil situación económica.


Han transcurrido más de dos meses de la emergencia sanitaria por el COVID-19, y la situación de los dos zoológicos ubicados en Cuenca se agudiza ya que la falta de recursos económicos para cubrir sus necesidades es su principal enemigo. En el caso de Amaru ya se habla de devolver los animales al Estado, mientras que Yurak Allpa aspira por mantenerse este año.

En lo que respecta a Amaru (ubicado en la autopista Cuenca-Azogues) que alberga más de 1.350 animales en diferentes especies, su director Ejecutivo y de Conservación, Ernesto Arbeláez, dijo que si la situación continúa así, soportarían “arrastrándose” hasta mediados de julio, y tendrían que devolver al Estado los animales recuperados, del que aseguró, no reciben aportes por el cuidado y mantenimiento de estos.

Arbeláez explicó que normalmente requieren cerca de 40.000 dólares mensuales para el funcionamiento del zoológico que incluye alimentación y cuidado de los animales, gastos por veterinaria, sueldos de empleados, educadores, biólogos, entre otras necesidades. “Por donaciones y estrategias que implementamos reunimos unos de 22.000 dólares en los dos meses de la crisis, es decir la cuarta parte de los 80.000 dólares que requeriríamos para ese tiempo”.

Indicó que para soportar la situación se han tenido que reinventar mediante “paquetes de propuestas para recibir el apoyo de las personas, familias y empresas que parcialmente han funcionado”. Citó que las personas colaboran con una base de cinco dólares, haciendo videollamadas a Amaru, “se agenda por Internet una hora y fecha para, durante unos 15 minutos promedio, aprendan sobre esa especie”; además se maneja la preventa de entradas en línea que se usarán cuando se reactive el zoológico.

Comentó que ahora han solicitado que también se hagan cargo de los animales la autoridad ambiental nacional y local (Ministerio del Ambiente y la Comisión de Gestión Ambiental de Cuenca respectivamente), que tienen la administración de la vida silvestre, “y son quienes han decomisado, movilizado y entregado en custodia todos los animales, que no son de Amaru sino que son del Estado”.

Mientras en el zoológico Yurak Allpa, ubicado en la parroquia Tarqui (sur de Cuenca) que alberga a cerca de 250 animales, la situación es similar. Su propietario, Alberto Vele señaló que incluso prevé gestionar créditos en la banca para mantener el refugio por lo que resta del año, “y ver qué pasa el próximo”.

Vele indicó que mensualmente para la operación del lugar se requiere de alrededor de 4.500 dólares, sin considerar que personas voluntarias colaboran para mantener los animales al igual que veterinarios, sino se necesitarían alrededor de 6.000 dólares.
Manifestó que por la crisis le ha tocado pedir “caridad” a los habitantes de Tarqui para mantener a los animales, es el caso de un vivero en la Estación de Cumbe que les ayuda o les cobra a bajos costos los insumos. Recalcó que reciben también ayuda de una persona del extranjero y una veterinaria que les colabora con alrededor de 500 dólares cada 15 días para la operación del zoológico.

Además, dijo que para liberar a los animales silvestres en su hábitat natural “cuesta dinero porque se tiene que cumplir con procesos previos para la liberación física y mental, radiografías, exámenes médicos, entre otros estudios”.

En ambos casos, las principales fuentes de ingresos son el valor de las entradas, visitas de grupos organizados, y donaciones de empresas privadas.

Asimismo, esperan que los Comités de Operaciones y Emergentes (COE) Nacional o Cantonal traten sobre la reapertura de los zoológicos, considerando el cambio de semáforo. Aseguran que se preparan para cumplir con los procesos de bioseguridad y controles necesarios. (BPR)-(I)

“Deben tener un plan de manejo y de contingencia”

Silvio Cabrera, responsable de la Unidad de Patrimonio Natural de la Dirección Provincial del Ministerio de Ambiente en el Azuay y en representación de la Coordinación Zonal del MAE, dijo que los animales son de propiedad del Estado, y los zoológicos son los responsables de la custodia de estos para lo que tienen un plan de manejo y otro de contingencia “donde tienen que prever recursos que se obtienen de donaciones, ingresos, apoyos, etc., para momentos como los que estamos viviendo”.

Cabrera manifestó que “lo más sencillo es decir devolvemos los animales, cuando los zoológicos tienen un proceso y responsabilidad con estos…No es que el responsable de la Unidad de Manejo pone recursos para el manejo de la vida silvestre; la vida silvestre les ha facilitado recursos a través de su gestión para el manejo de los animales”.

Agregó que el Ministerio es consciente que existe una dificultad, saben cuáles son las limitaciones, ya que una gran parte de los ingresos de los zoológicos son por las visitas, “y lo que implica la alimentación y cuidado de los animales”.

Señaló que están gestionando “algunos recursos para apoyar a los zoológicos, una de las alternativas es la autosostenibilidad, es decir que puedan tener criaderos de tilapia, pollo, cuyes, huertos hortícolas, y de ahí generar los alimentos para abastecer a los animales”. (I)