Madrid en estado de alarma para frenar el coronavirus

El Gobierno español decretó el estado de alarma en la ciudad de Madrid y ocho municipios de la región para poder retomar las medidas restrictivas dictadas hace una semana por el Ministerio de Sanidad para frenar el coronavirus, y que fueron anuladas ayer por un tribunal al considerar que vulneraban las libertades de los ciudadanos.

España suma ya 861.112 contagios por coronavirus desde el inicio de la pandemia y 32.929 fallecidos (241 en el último día), y esta segunda ola está atacando con especial virulencia a la región de Madrid, que ha visto incrementado el número de infecciones en un 70 % desde el pasado mes de julio, según datos oficiales.

El Ejecutivo encabezado por el socialista Pedro Sánchez optó finalmente por decretar el estado de alarma en Madrid, después de días de discrepancias y tensión política entre ambas administraciones, la central, de corte izquierdista, y la autonómica madrileña presidida por la conservadora Isabel Díaz-Ayuso.

Mientras el Gobierno central es partidario de confinar perimetralmente municipios enteros, como se ha hecho ya en otros lugares de España, el regional de Madrid ha abogado siempre por el cierre por barrios o zonas sanitarias en función de la incidencia de los contagios.

La aplicación del estado de alarma no supondrá ningún cambio sobre las medidas que estaban en vigor hasta ayer, y se extenderán desde hoy mismo hasta dentro de 15 días, según explicó el ministro de Sanidad, Salvador Illa, en rueda de prensa tras el consejo de Ministros convocado de manera extraordinaria para tratar la situación de Madrid tras la decisión judicial.

PROTEGER LA SALUD DE LOS MADRILEÑOS

«Se ha llegado aquí porque no ha actuado antes la Comunidad de Madrid», afirmó Illa, quien utilizó durante su comparecencia frases como «la paciencia tiene un límite» para referirse a la negativa constante de las autoridades madrileñas a aceptar las restricciones propuestas por su ministerio durante este tiempo.

El ministro dio datos sobre la gravedad de la situación en esta región: más de 60 fallecidos en últimos días, unas 3.360 personas hospitalizadas y 498 «luchando por su vida» en las UCI, y concluyó que la obligación de un Gobierno con alma es doblegar la curva de contagios aunque suponga sacrificios.

También justificó las medidas del Gobierno para proteger la salud de los madrileños y evitar que el virus se extienda por el resto de España, puesto que hoy empieza una largo finde de semana, ya que el lunes, 12 de octubre, es festivo.

Las restricciones afectarán a la ciudad de Madrid y a ocho municipios de la región, que tienen una incidencia acumulada de más de 500 casos por cada 100.000 habitantes.

En total más de 4,5 millones de personas, que no podrán salir de sus municipios salvo por necesidades de salud, trabajo, educación, cuidar a personas o desplazamientos inapelables.

Además, se prohíben las reuniones de más de seis personas,  habrá una reducción de aforo en locales públicos y un adelanto de los cierres, entre otras medidas.

UNA MEDIDA «DIFÍCIL DE ENTENDER»

Para los responsables de la comunidad autónoma de Madrid la imposición del estado de alarma es «difícil de entender», según indicó hoy en rueda de prensa el consejero regional de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero.

Los datos ofrecidos este viernes por el Ministerio español de Sanidad, señalan que el 37, 6 % de los 12.788 nuevos contagios notificados en todo España se registraron en la región de Madrid, que sigue encabezando la lista de las comunidades autónomas más afectadas por el virus.

De acuerdo a los cálculos del Ministerio, Madrid sumó 2.256 infecciones en las últimas 24 horas. Muy de lejos le sigue la comunidad autónoma de Aragón (este), con 487 infecciones; Andalucía (sur), con 477 nuevos positivos confirmados; Galicia (noroeste), 458; Navarra (norte), 452 y País Vasco (norte) con 438.

Por su parte, las autoridades regionales madrileñas notificaron hoy 3.927 contagios (1.428 de ellos de las últimas 24 horas y el resto de días anteriores e incorporados ahora al recuento), lo que supone casi mil menos que el jueves, mientras que los fallecidos en hospitales pasaron de 39 a 35 desde el jueves.

Con estos datos, el plan que el Ejecutivo de Díaz Ayuso presentó «in extremis» al Gobierno central para contener la pandemia pasaba por restringir la movilidad por áreas básicas de salud, pero con criterios más duros, bajando la incidencia de 1.000 casos por cada cien mil habitantes a 750 como uno de los criterios para establecer las limitaciones.

«El estado de alarma era totalmente evitable porque había alternativas. Lamentablemente los políticos hemos vuelto a fracasar», escribió en su cuenta en Twitter el vicepresidente madrileño, Ignacio Aguado, de la formación liberal Ciudadanos (Cs), que gobierna en coalición con el Partido Popular (PP) en la comunidad de Madrid.

Faltó la reacción de la propia Díaz Ayuso, respaldada por el líder nacional de su partido, Pablo Casado, quien aseguró que la decisión del Ejecutivo español obedece a «fines partidistas».

DESPLIEGUE POLICIAL

Agentes de la Policía Nacional en un control en la Nacional V, para vigilar el cumplimiento de las restricciones a la movilidad impuestas por el estado de alarma que ha decretado el Gobierno.

Más de 7.000 agentes de la Policía y de la Guardia Civil vigilarán que se cumplan las restricciones del estado de alarma decretado este viernes por el Gobierno, informó y el ministro español del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

Tanto la red viaria de los nueve municipios afectados, incluido Madrid capital, como sus infraestructuras de transporte serán especialmente vigilados por los agentes para hacer velar el confinamiento perimetral.

De momento los controles policiales serán informativos sin propuestas de sanción a la espera de la autorización judicial.

El estado de alarma en Madrid coincide con el inicio de un fin de semana largo en España por la celebración el próximo lunes del 12 de octubre, unos días de asueto que normalmente constituyen unos de los mayores desplazamiento del año hacia los lugares de costa y segundas residencias en general desde el centro del país.

«Hay que evitar que el virus se expanda a otras comunidades», subrayó Salvador Illa. EFE