La Unidad Antisecuestro y Extorsión (Unase) en coordinación con la Fiscalía ejecutaron el operativo denominado “Nemesis 12”, de forma simultánea en Cuenca, Guayaquil y Loja, logrando la detención de cuatro personas para investigaciones por presuntamente estar involucradas en el delito de secuestro y extorsión.
Los agentes especializados luego de recibir una investigación abierta, mediante una denuncia presentada en la Fiscalía, efectuaron tareas investigación logrando indicios.
Inmediatamente, coordinan con la autoridad competente las respectivas ordenes de allanamiento. Así, de forma simultánea ejecutan el operativo policial en las referidas ciudades, allanando dos domicilios.
Los policías detuvieron a Henry A. y Ángel B., quienes registran antecedentes penales por homicidio simple, así también, son detenidas Maritza M., y Venus B.
En los inmuebles, la Policía encontró varios indicios del hecho, como: tres teléfonos celulares, tarjetas bancarias y documentos vinculantes.
Los aprehendidos fueron puestos a órdenes de la autoridad competente en la Unidad Judicial de flagrancia del cantón Duran.
De acuerdo con los datos preliminares de las investigaciones, los sospechosos serían quienes realizaban llamadas telefónicas a los familiares de Ángel Y., quien se encontrada reportado como desaparecido desde el 4 de junio del 2020. Las comunicaciones de desconocidos exigían altas cantidades de dinero a cambio de la libertad del secuestrado.
En otro accionar policial, tras diligencias realizadas por la Policía Nacional, el pasado 8 de octubre, Ángel Y. fue encontrado sin vida. Las circunstancias del deceso son investigadas.
El artículo 162 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) establece el secuestro extorsivo y señala que si la persona que ejecuta este delito tiene como propósito cometer otra infracción u obtener de la o las víctimas o de terceras personas dinero, bienes, títulos, documentos, beneficios, acciones u omisiones que produzcan efectos jurídicos o que alteren de cualquier manera sus derechos a cambio de su libertad, será sancionada con pena privativa de libertad de 10 a 13 años.
Cuando por causa o con ocasión del secuestro le sobrevenga a la víctima la muerte, se sancionará con pena privativa de libertad de 22 a 26 años. (I)
