Patris corde

José Chalco Salgado josechalcosalgado@gmail.com

Con corazón de padre. Es la armonía, amor y sentido de familia como sostén fundamental desde el camino sensible del padre de hogar. La Carta apostólica: Patris corde que publicara el Papa Francisco, declara al año 2021 como el año de San José, recordando el trasfondo de su presencia y razón en la humanidad.

Durante los últimos años el rol y sentido del padre se ha visto desplegado, bajo consideraciones ideológicas, rencillas históricas o incomprensión de su valor y sentido; como alguien a quien hay que despojarle de sus afectos y razones, colocándolo -muchas veces- en el paredón.

Pero el Patris corde, a inverso sentido, es un homenaje a quienes, como San José, están detrás de las luces, la tarima y el centro de reconocimientos, aquellos que realizan un trabajo sin medida ni cálculos, sin esperar reconocimientos o aplausos, sino que lo hacen por entregarse completamente al otro, a la comprensión sensible y trabajo arduo. La Pandemia, como menciona el Papa, deja al descubierto la importancia de quienes entregan esperanza cada día “(…) el hombre que pasa desapercibido, el hombre de la presencia diaria, discreta y oculta (…)”, de quien, sin embargo, es suyo el protagonismo en la historia.

Así, destaca las cualidades de San José como un padre amado, tierno y obediente; un padre de acogida de la voluntad de Dios y del prójimo, es decir que, sin condiciones previas, sin violencia psicológica o verbal, llevó a su mujer de la mano sin exigir explicaciones o determinaciones, sino con un sentido de entrega. Un padre valiente y creativo, que ante la adversidad y dificultad supo encaminar y cuidar del hambre y jamás abandonó su familia. Un padre que enseña el valor, la dignidad y la alegría del trabajo. Un padre descentrado por amor a su familia, responsabilizándose de sus vidas y encontrando el camino para descentrarse de él mismo. Valiente y humilde. Trabajador y sensible.

El corazón de un padre ejemplo, cómplice a su misión, es la mirada que trae la Carta apostólica. Destaca el rol, indebidamente olvidado, de un padre en la misión por ser cada día más humanos y más cercanos a la trascendencia que entiende de esperanza, esfuerzo y dedicación en el camino. (O)