Agua para todos

Nicanor Merchán Luco

Como todos sabemos el próximo 7 de febrero junto con las votaciones para presidente se consultará a los cuencanos si queremos cuidar nuestra agua en las zonas de recarga hídrica. Creo que la consulta está por demás y que el SI ganará con amplia mayoría. La Asamblea General de las Naciones Unidas en julio del 2010 reconoció el derecho humano al agua afirmando que el agua potable limpia y el saneamiento son esenciales “para la realización de todos los derechos humanos”. Obliga a los pueblos a proporcionar un suministro de agua potable, saludable, limpio y accesible para todos.

En el 2002 el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales estableció que “el derecho humano al agua es indispensable para una vida humana digna”. Entonces se define al agua como el derecho de cada uno a disponer de agua suficiente, saludable, físicamente accesible y asequible para su uso personal y doméstico. Por esto es que se pide a la comunidad internacional y a los gobiernos nacionales y locales para que redoblen los esfuerzos para satisfacer a las necesidades humanas esenciales para el desarrollo.

El abastecimiento del agua sin duda alguna debe ser suficiente y permanente para el uso personal y doméstico. El agua que es indispensable para beber, para la subsistencia humana, para la preparación de alimentos, la higiene personal y la limpieza del hogar; según la Organización Mundial de la Salud OMS es necesario entre 50 y 100 litros de agua por persona y por día para cubrir las necesidades básicas. El agua debe ser saludable, libre de microorganismos, sustancias químicas y de peligros radiológicos, la calidad del agua es básica. El agua es imprescindible para el ciclo de la vida, pues todo el mundo tiene derecho al servicio del agua, por esto hay que cuidar y almacenar el agua en sus fuentes. (O)