Yaku Pérez: un no tajante a la violencia, pero también al fraude en Ecuador

El dirigente indígena Yaku Pérez, que se disputa un histórico pase al balotaje en Ecuador, pide a sus seguidores evitar la violencia pero insiste en que el Consejo Nacional Electoral será responsable por cualquier «fraude» y que, de ser necesario, agotará todas las instancias judiciales.

Con apenas 4.252 votos por encima del tercer candidato, cuando faltan por contar 117 actas y por revisar 1.258, el pase a segunda vuelta en las elecciones presidenciales sigue alimentando en Ecuador un clima de tensión que, muchos, temen que desemboque en una ola de violencia como la de octubre de 2019.

En una entrevista a Efe desde Guayaquil, donde supervisa el escrutinio de actas, Pérez asegura que «no quiere que se apague una sola vida» por él y reitera que se siente víctima de una confabulación de derecha (Guillermo Lasso y Jaime Nebot) e izquierda (Rafael Correa) para impedir que un «indígena capaz» y «antiextractivista» llegue por primera vez a la Presidencia.

SIN CARGOS DE CONCIENCIA

Pregunta: Tres días desde los comicios y se van acortando diferencias. No hay nada decidido. El lunes lo vimos llamando a vigilias y plantones, el martes más conciliador, ¿dónde está hoy?

Respuesta: No quisiera que se repitan pérdidas de vidas humanas. Diez asesinatos en octubre, daños a la propiedad pública y privada. No quiero que por mi responsabilidad se apague una sola vida. Soy profundamente pacifista. Llamo a la calma pero agotaremos hasta la última instancia en la legalidad.

Ojalá no se dé el fraude. Vamos a pasar con las justas, sí, pero a la vez estamos viendo estas inconsistencias que huelen a fraude.

P: Elecciones ganadas por un puñado de votos las hay en todos lados. El caso más conocido, el de EE.UU. en 2000. El martes se reunió usted con el Consejo Nacional Electoral (CNE) y la OEA para aclarar cuentas.

R: El CNE y ahora también la OEA tienen una responsabilidad gigante. Si hay fraude, ¿quiénes son los responsables? El CNE. Y las consecuencias pueden ser funestas. Ojalá que no. Quisiera que gane la transparencia.

Pero violencia no, para nada. Si por mí se va a dar violencia yo prefiero irme a la casa. No quiero cargarme la conciencia y para eso es mejor que el CNE actúe antes. ¿De qué sirve llevar a la mejor clínica un fallecido? Hay que administrar los medicamentos antes, después ya no tiene sentido.

DIFÍCIL CREER EN EL CNE

P: Ustedes no tenían suficientes voluntarios para la «defensa del voto» en los colegios electorales. ¿Por qué no se organizaron?

R: Tuvimos 12.000 voluntarios para casi 40.000 mesas. Nos era muy difícil. Los otros candidatos tenían gente pagada. Nuestra gente incluso fue a trabajar con ellos porque lo necesitan. Y ellos mismos nos han alimentado de algunas de estas inconsistencias, como que no les permitían fotografiar actas originales, o que en Cayambe en vez de adjudicarnos 62 votos en una junta, solo nos pusieron 2. Una cosa es el error y otra cosa es el delito.

P: ¿Confía siquiera en el CNE?

R- Difícil respuesta. Deja muchas dudas, despierta muchas desconfianzas la misma composición del CNE, donde no tenemos ni un solo vocal siendo Pachakutik la tercera fuerza política del país y ahora la segunda. Nos da una (sensación de) impotencia el no tener una persona adentro para ver qué están cocinando. ¡Mucha impotencia!

P: Más allá de sondeos y proyecciones estadísticas… ¿Tiene pruebas concretas de ese supuesto fraude?

R: Desventajosamente, para hacer un fraude se utilizan sistemas muy sofisticados para no dejar evidencias. Pero, siendo abogado y penalista, repito que «no hay crimen perfecto, algo queda». Y en ese algo sí veo algunas inconsistencias, como por ejemplo: en Guayas presentan 60 actas con cero votos a Yaku. Y yo digo, si quieren hacer trampa, háganle un poquito más refinado, no sean groseros, pónganme aunque sea un voto, cinco, diez… ¡Hagan algo creíble!

INDÍGENA Y ANTIEXTRACTIVISTA

P: ¿Cree que lo quieren bloquear por su origen indígena?

R: No creo que por indígena, sino porque voy a ser el primer presidente indígena antiextractivista de América Latina. Ya hubo un indígena, Evo Morales, pero él era extractivista. Voy a ser el primero antiextractivista, anticorrupto y antiprepotente; es decir, un indígena honesto, ecológico y respetuoso de los derechos humanos. Eso es lo que temen.

Para mí está claro el pacto Correa-Lasso-Nebot. A Correa, que es el más preocupado, no le interesa que gane porque Yaku no tiene techo. Lasso tiene techo, no ganaría porque tiene antecedentes del feriado bancario (1999), de haber cogobernado con el actual Gobierno, el peor de la historia. Por eso buscan a toda costa meter mano en el CNE y enturbiar el proceso electoral.

P: El expresidente Correa dice que usted no es verdaderamente indígena, hay hasta un debate en redes por racismo.

R: El colonialismo y el racismo existen aún. Las razas no, hay una sola: la raza cósmica.

P: ¿Pero le afecta de alguna manera que le nieguen su identidad?

R: No me afecta mayormente. Por los cromosomas de este cuerpo cruzan genes quichuas y cañaris. Creo que los señores que dicen eso no conocen mi piel morena ni mi nariz aguileña. ¡Pero no sé por qué tengo que estar dándoles explicaciones!

Es una forma de confundir a la población, y ahí hay mucha maledicencia, no hay construcción, no hay mente abierta, peor el corazón. Parafraseando a Einstein, más fácil es descomponer un átomo que un prejuicio. Y yo agrego, más fácil descomponer un átomo que liberarnos de las cadenas coloniales. El colonialismo no está solo en Europa, el colonialismo vino de Europa para quedarse acá y Correa es un colonizador en extremo.

UN LOGRO HISTÓRICO

P: Pase o no pase, el suyo y el de Pahckutik es ya todo un logro histórico. Nunca antes habían conseguido tantos votos. ¿El secreto?

R: No hay ninguno. Soy un candidato que muchos pensaban que era solamente un tira-piedras, como me calificaba Correa. Gané la prefectura de Azuay con 10 puntos de diferencia, solo con el saxofón y la bicicleta. Pero eso es simbólico.

(Me votan) por mi trayectoria de honestidad, recién ahí se dieron cuenta que he sido profesor de tres universidades, que tengo cuatro posgrados, que he escrito siete libros. Se dieron cuenta que soy un indígena capaz que no solo defiende su etnicidad sino también la ecología, y que está en sintonía con los jóvenes.

Entonces, ya no soy únicamente el representante de los indígenas (6-7 % de la población), sino de amplias masas de los sectores populares e incluso intelectuales que han empezado a curiosear mis escritos y mi filosofía andina.

Es histórico indudablemente, es lindo que ya no solamente me represente a mí, sino a un sueño. Y si me hacen fraude yo regreso a mi casa, pero se pierde todo un sueño, un proyecto de la juventud y sectores sociales que ven una esperanza en esta candidatura.

P: Por primera vez van a tener también un peso considerable en la Asamblea Nacional (27-28 escaños). ¿Qué le gustaría que hiciera su grupo al comenzar la legislatura?

R: (Primero,) fiscalizar todos los actos de corrupción, que no queden en la impunidad porque eso es un motor para la corrupción. (Segundo) hacer leyes que beneficien no a la oligarquía, no a la banca, no a los organismos multilaterales, sino a los ecuatorianos. (Y tercero) mantener coherencia, hacer lo que se dijo con la misma humildad, sinceridad y transparencia. No hacer alianzas para aprobar leyes que vayan en contra de nuestro pueblo. Hay que mantener sindéresis entre lo que se dice y lo que se hace.

RICOS SÍ, POBRES NO

P: La política ecuatoriana, según los resultados electorales, refleja una sociedad altamente fragmentada. Hace ya décadas que los presidentes son acusados de gobernar para uno u otro grupo. Si rompiera el techo de cristal ¿cómo gobernaría?

R: Absolutamente para todos. La diferencia es que yo voy a ser como un padre de familia: el hijo que ya tiene lo suficiente, no recibirá tanto apoyo como el hijo que está recién en la escuela. No por eso voy a perjudicar al mayor pero, teniendo este hijo más recursos y más riqueza, puede ayudar más al hijo menor a través de impuestos.

P: Difícil equilibrio en un país tan fragmentado, con tantas diferencias sociales y una banca denostada.

R: Yo les deseo que les vaya bien a los ricos porque, mientras más ganen, más impuestos tendrán que pagar, y con eso levantaré el nivel de vida de los pobres. No quiero que los ricos se empobrezcan, sino que los pobres eleven su nivel de vida. EFE