Responsabilidad por la salud

Desconcierta saber por propia versión del presidente Lenín Moreno que no hubo un plan de vacunación contra la Covid-19, contradiciéndose él y sus exministros de Salud.

La credibilidad del presidente se deteriora día tras día. Ahora informa que el pasado fin de semana el nuevo ministro de Salud, Mauro Falconí, trabajó sin descanso elaborando aquel plan.

Pero, ¿se puede estructurar un plan así de rápido, cuando arrecia la enfermedad, no funciona bien la página digital para la inscripción de los sectores poblacionales, arrecian las críticas y la investigación judicial por los inmunizados que no estaban en lista?

No haber tenido un plan de vacunación deja mal parado a Ecuador ante la comunidad internacional y los organismos de Salud. Alentamos a que tan engorrosa situación sea corregida a tiempo y bajo los parámetros técnicos y metodológicos que el caso amerita.

Ahora resulta que el ministro Falconí, a más de pedir la renuncia a los coordinadores zonales y estos a los directores de los hospitales, pretende que estos respondan ante la Justicia por los “vacunados vip”.

Cuando estalló el escándalo, desde la Zonal 6 del Ministerio con sede en Cuenca se dijo que la lista de privilegiados vino elaborada desde Quito, y a sus directivos se les obligó a callar ante la prensa.

Endosar supuestas culpas a los mandos medios en nada contribuirá a la transparencia que exige el país.

Es momento que el gobierno, sin desmerecer lo que ha hecho, asuma con mayor responsabilidad y entereza el tema de la salud, pese al poco tiempo que le queda y al desmoronamiento de su administración.

Comenzar por comunicar bien, no levantar vanas expectativas y transparentar el plan de vacunación que dice tener listo, son tareas inmediatas para apaciguar el desconcierto ciudadano.

Ahora, el Ministerio de Salud firmará un acuerdo con el Municipio de Guayaquil para dotar a esta ciudad de 1,8 millones de vacunas.

Ojalá este gran paso también se dé con todas las Municipalidades del país, pues tienen los mismos derechos. Ojalá que no hayan “Municipalidades vip”, al igual quelos vacunados privilegiados.