La cooperación, clave para combatir el cáncer en la UE

La cooperación de los estados miembros es clave para implementar la investigación en prevención y terapia contra el cáncer, según insistieron los responsables de la UE durante la Cumbre sobre la Investigación del Cáncer celebrada hoy en Oporto bajo la presidencia portuguesa de la UE.

La comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, recordó el plan diseñado por la UE con 4.000 millones para combatir el cáncer y los participantes apostaron por un modelo de investigación transnacional cuyos resultados sean compartidos en red.

En Europa se diagnosticaron 2,7 millones de personas con esta enfermedad a lo largo de 2020, año en que fallecieron 1,3 millones, número que se «incrementará», por lo que «el cáncer es una de las prioridades europeas», declaró la comisaria europea de Innovación e Investigación, Mariya Gabriel,

EL FUTURO DEL CÁNCER

«Todavía hay diez estados miembros sin una buena red de centros contra el cáncer», desveló Manuel Heitor, ministro de Ciencia y Tecnología de Portugal, quien recordó el compromiso de las presidencias alemana, eslovena y portuguesa para «profundizar» en la «acción colectiva y transnacional» de la lucha contra el cáncer.

«En 2040 se habrá producido un crecimiento del 40 % de los enfermos de cáncer respecto a las cifras de 2020», señaló Anton Berns,  presidente de la Academia Europea de Ciencias del Cáncer (EACS).

Para 2030 se prevé que el 75% de los pacientes con cáncer sobrevivan diez o más años con una buena calidad de vida.

El crecimiento del número de pacientes encarece los sistemas de salud, debido a la necesidad de medicamentos o instalaciones y esto genera «desigualdades en el acceso a la atención del cáncer entre los países y dentro de ellos», argumentó Berns.

La prevención es la esperanza para controlar estas cifras y por ello el plan detalla la necesidad de identificar a las personas en riesgo por factores como la exposición a cancerígenos, el estilo de vida, el factor socioeconómico o la predisposición genética.

Mejorar la prevención, la detección temprana y la implementación de mejoras farmacológicas son algunos de los objetivos que el ecosistema europeo ya ha empezado a trazar en Oporto. EFE