Discursos y Promesas

Ana Abad R.

Se agradece el claro del discurso neoliberal del Presidente Lasso porque marca su accionar en los próximos cuatro años, delimita también el espacio de conflicto social en el que nos veremos envueltos durante este régimen. Las realidades son crudas y las posibilidades para resolver el empobrecimiento galopante del país cruzan intereses económicos de grupos de poder nacionales y transnacionales que se enfrentarán con una de las principales reivindicaciones políticas de los pueblos y nacionalidades indígenas como es la defensa de la naturaleza y sus derechos. ¿Cómo hará el Gobierno para que “la prosperidad material signifique también la limpieza de nuestro aire, de nuestros bosques y mares” cuando promete mayor extractivismo? Si “el pueblo quiere agua” ¿cómo si la deforestación y la tala ilegal se incrementan cada día más y se pretende hacer minería en las nacientes de agua? ¿Cuál será el papel de la Secretaría para Pueblos y Nacionalidades? ¿Cómo concretará la Presidenta de la Asamblea su promesa de fiscalizar las concesiones mineras y petroleras mientras la decisión del Gobierno es incrementar la producción petrolera y estimular la “minería responsable”? (O)