35.000 licencias de conducir fraudulentas fueron anuladas por parte de la Agencia Nacional de Tránsito en el país.
Ante esta situación, Adrián Castro, director ejecutivo de dicha dependencia, indicó que han presentado las respectivas denuncias en la Fiscalía y a la par han fortalecido los sistemas y seguridades. “Pudimos notar que los usuarios obtuvieron estas licencias sin que exista absolutamente ningún respaldo documental que demuestre que haya cumplido el curso de conducción”.
La semana pasada realizaron un allanamiento en la Agencia Nacional de Tránsito de La Troncal, en donde detectaron irregularidades en los resultados de exámenes psicosensométricos, como parte del proceso que llevan adelante.
Azuay es la segunda provincia en la que se registra el mayor número de licencias de conducir fraudulentas con 5320, siendo superada solamente por Guayas (6.613), según un desglose que realizó la ANT.
Gabriela Pacheco, directora provincial de la ANT, indicó que ha revisado personalmente estos procesos que se suscitaron en la provincia. “En los registros de cursos y escuelas de conducción del Azuay aparentemente se ha vulnerado el sistema, entonces ahí es donde aparecen estos registros. No lo puedo confirmar, pero con la básica experiencia que tenemos para validar la información ha ocurrido esta situación…”.
La autoridad acotó que inicialmente han podido visualizar que dichos documentos no registran el nombre del usuario (funcionario que tiene un código y una clave para ingresar al sistema de la ANT) que los emitió, “es ahí donde ingresan peritos informáticos, Fiscalía y todas las investigaciones para identificar quién realizó esos procesos. Como lo dijo el director ejecutivo: debe haber vinculación con funcionarios, pero funcionarios que manejen un poco más allá del sistema…Es importante aclarar que las licencias no son emitidas en Azuay”.
Pacheco cree que las investigaciones no tardarán mucho porque es una situación “emergente”, pues ya existe una resolución en firme para la anulación de licencias.
La funcionaria señala que si las personas cumplen todos los requisitos no hay necesidad de pagar valores adicionales para obtener este documento. Por tal motivo, hace un llamado a no caer en estafas.
“Por favor, pedimos a la ciudadanía que no se deje sorprender por terceras personas. Si bien es cierto, hay ocasiones en que los trámites demoran un poco, como el tema de los turnos, por ejemplo, nosotros tomamos acciones continuamente para que la ciudadanía sea atendida de la mejor manera”, expresó.
¿Cómo averiguar si su licencia es fraudulenta?
Para verificar si una licencia es fraudulenta debe ingresar a la dirección web “Consulta de Citaciones”: https://bit.ly/consultaant . Aquí debe ingresar su número de cédula.
Después de cumplir este paso se desplegará una ventana con todos sus datos, tales como: tipo de licencia, validez, puntos que dispone, valores pendientes, en impugnación, anuladas, en convenio. Si es el caso, le saldrá la palabra “anulada”.
La página electrónica no se encontraba disponible la tarde del miércoles y la mañana de ayer, pero el problema técnico fue solucionado.
También puede realizar consultas presencialmente en las oficinas de la ANT.
¿Cuáles son las sanciones?
Gabriela Pacheco explicó que las licencias fraudulentas serán anuladas. “Si el usuario utilizara o condujera este documento anulado, adulterado o lo que fuere el caso, la Policía Nacional tomará procedimiento por mal uso de un documento público”.
¿Se puede impugnar?
La funcionaria explicó que las licencias fraudulentas entran a un proceso en el cual deben demostrar la legalidad del documento. “Si las personas implicadas en estos casos no tienen pruebas y la ANT tiene toda la documentación, ya no habría salvedad”.
Mesías Vicuña, secretario general del Sindicato de Choferes Profesionales del Azuay, destacó que en esta y anteriores administraciones siempre han denunciado este tipo de irregularidades con las licencias de conducir que perjudican al Estado, pero lamentablemente nunca les tomaron en cuenta. “Hace algunos años, inclusive, entregamos muchas licencias falsificadas que estaban en Guayaquil, pero no nos consideraron, por tal razón ahora apoyamos la gestión que está realizando la ANT y la Fiscalía”.
El dirigente no comprende cómo personas pueden llegar a adquirir documentos habilitantes para conducir vehículos, especialmente pesados.
Su apreciación es tal que considera que los accidentes de tránsito pueden estar relacionados con la falta de preparación de los conductores. “La corrupción está en las agencias de tránsito, porque nosotros como escuelas podemos comprobar todo con documentación como el registro de asistencia, por ejemplo. Ellos deben cumplir 440 horas, tiempo en el cual se instruyen en diferentes materias como: tránsito, educación vial, mecánica automotriz, inglés…”.
Vicuña, finalmente, envió un mensaje a no confiar en los “tramitadores” porque “representan un riesgo para quienes compran la licencia”. (I)
CIFRAS
23
Millones de dólares es el monto total que ha movido las licencias fraudulentas, ocasionando una pérdida de 3 millones para el Estado.
110
dólares cuesta la especie de las licencias profesionales, y 68, las no profesionales, y 20 dólares el examen psicosensométrico.
170
dólares, promedio, cuesta el curso para adquirir licencias no profesionales, y entre 900 a 1.600, las profesionales.
14.000
licencias profesionales y 21.000 tipo B, conocidas anteriormente como sportman.
El dato
Adrián Castro anticipó que han evidenciado otras “irregularidades” que las irán dando a conocer con el transcurso del tiempo.
