El aroma del café atrae su consumo

l olor a café se percibe en toda la cuadra de la calle Mariscal Sucre y Padre Aguirre, cuando Carlos Julio Jaramillo, propietario de El Tostador, muele el grano para venderlo al público.

Abrió su tienda en Cuenca en 1996, siguiendo la tradición de su padre Héctor Jaramillo, de 84 años, un personaje reconocido en Loja, que hasta ahora continúa con la actividad.

La clientela de Carlos Julio Jaramillo, que en gran porcentaje son extranjeros, se siente atraída por el aroma del café.

Muchos turistas que entran a su negocio, preguntan sobre el proceso de elaboración y lo convierten en un producto de exportación. Semanalmente vende cerca de 500 libras.

El café que distribuye es arábigo, procedente de Loja, especialmente de los cantones Quilanga, Chaguarpamba, Olmedo y Catamayo. “Nosotros adquirimos el café y lo procesa mos”, contó Jaramillo.

El café que adquieren es verde, se encargan del secado y el tueste. Hay dos presentaciones: un tostado fuerte, siendo el que más se consume en Cuenca; de igual manera, un tostado gourmet, más conocido como italiano. “El gourmet es conocido como el café lavado porque se lo deja en pergamino. Así se obtiene un café seleccionado”, relató. El tiempo de tueste del café es de 30 minutos.

Tecnología

El proceso de secado y tueste se realiza en Loja. Sin embargo, en el último año adquirieron una máquina para procesar el café en Cuenca, con capacidad para 120 kilos.

El olor que produce el molino es exquisito para muchas personas. No se resisten y consumen en el propio local. Los extranjeros prefie ren el café fuerte, que para los cuencanos es conocido como el “cargado”. Para acompañar esta bebida, las opciones son los tradicionales chumales, tamales y empanadas.

Carlos Julio Jaramillo es el propietario de El Tostador, en la calle Mariscal Sucre.XCA

De igual manera, el café es colocado en una máquina y se obtiene en varias de sus presenta ciones como son: espresso, americano, capuchino, latte, moca, por mencionar algunos.

En otros casos, las personas que transitan por esta cuadra del Centro Histórico se sienten atraídos por su aroma y adquieren las fundas de 250 gramos y 450 gramos, valorados en dos y cuatro dólares, respectivamente.

Propios y extranjeros adquieren el café recién molido. El producto de exportación es comprado en grano, en la mayoría de los casos.XCA

Para el café de exportación se ade cuó una funda con válvula desgasifica dora, protegiendo el aroma dentro de la bolsa.

Algunos prefieren el café molido; otros lo compran en grano para conservar su olor. “Llegan personas de Estados Unidos, España e inclusive Qatar y piden el café en grano. Ellos se encargan de hacer el proceso porque se mantiene su aroma”, contó Carlos Julio Jaramillo.

Hay dos presentaciones: un tostado fuerte que es el tradicional y consumido por los cuencanos y un tostado gourmet.XCA

Pero este no es el único local de venta de café lojano en la ciudad. Existen varias cafeterías y puntos de distribu ción en el Centro Histórico de Cuenca, pero a diferencia de El Tostador, única mente se encargan de molerlo y vender. (JRU) (I)