Alfaro dice que la clave para ganar estuvo en la concentración

El seleccionador de Ecuador, Gustavo Alfaro, en un partido de las eliminatorias rumbo a Qatar. EFE

El seleccionador de Ecuador, el argentino Gustavo Alfaro, resaltó el triunfo por 1-0 este jueves sobre Venezuela y precisó que fue «la concentración» en defensa lo que permitió mantener la red intacta y el resultado hasta el final.

«La clave estuvo en la concentración, al saber que son partidos apretados, sin muchas opciones, que había que aprovechar la mínima oportunidad para ganar, salimos el segundo tiempo con el afán de ampliar la ventaja, pero sin descuidarnos para mantener el cero», reconoció Alfaro al final del partido en una rueda de prensa.

Tras el triunfo de hoy, Ecuador se mantiene en el tercer puesto de las eliminatorias sudamericanas con 20 puntos que, cualquiera sean los otros resultados de la fecha, se sostendrá ahí hasta la próxima jornada cuando la Tri visite a Chile, el martes venidero en Santiago.

Para Alfaro, es bonito golear por 4-0 pero mantener la victoria por la mínima también puede conducir al Mundial, porque lo «importante» es ganar.

«Nos faltó poder llegar mejor armado en nuestros ataques para intentar definir el partido, porque el 1-0 daba para un partido abierto hasta el final, con una Venezuela con mejor estatura y fortaleza física. Por eso, sobre la parte final del partido tuvimos que fortalecer a nuestra defensa», expresó.

Luego dijo que «habíamos hablado previo a éste partido que, desde hoy, comenzaba otra eliminatoria», sobre «nuestra necesidad por mantenernos terceros», y de que de eso «se podría aprovechar el rival, que está haciendo un gran trabajo aprovechando estos partidos».

Alfaro insistió en que «sabíamos que iba a ser una victoria sufrida, trabajada, pero que nos permitiría dar ese gran paso de mantenernos en la zona de clasificación, por lo que también es bueno disfrutar de las victorias que se logran en forma sufrida».

Y reconoció que el desgaste físico del equipo -fruto del esfuerzo y de los efectos de la altitud de los 2.850 metros sobre el nivel mar de Quito, y por la presión del rival- llevó a efectuar cambios para fortalecer a su defensa. EFE