Efectos positivos

En administración pública hay gestiones que terminan en obras materiales, como vías de comunicación o locales educativos y se las percibe por los sentidos; su inauguración con presencia de autoridades testimonia el final exitoso.

En otras medidas los efectos no son tan evidentes ya que se dan en el ordenamiento social cuyas crisis o avances se captan en la dinámica existencial. Cuando han tenido lugar situaciones de crisis, su superación no tiene la visualidad de edificaciones materiales y la evaluación de la ciudadanía es imprecisa, pese a datos estadísticos.

Los efectos individuales y colectivos del aislamiento como efecto de la pandemia han sido muy agudos y la dinámica de la economía se manifestó con la notable baja del ritmo de muchos negocios, Algunos con mayor gravedad como hotelería y turismo. Una oferta electoral del actual presidente fue vacunar contra este virus a 9 millones de ecuatorianos en 1os primeros cien días, oferta que se cumplió.

En los dos últimos feriados largos ha sido evidente la reactivación de los mentados sectores y del área global. Ya no se ve enfermos de coronavirus en abarrotados hospitales.  Es evidente que estos resultados provienen de la vacunación masiva que fue recibida positivamente por los ciudadanos.

Para la reactivación económica que esperamos, es esencial que desaparezcan o mitiguen los efectos negativos de esta pandemia y un camino es la vacunación. La formación del presidente, así como su experiencia, están en economía, para lograrlo hay que superar causas de la crisis con medidas reales como la que tomó. Aún no llegamos al quinto mes de gobierno, pero es evidente su eficiencia al convertir ofertas en realidades. Arriesgado sería afirmar que ha desaparecido el coronavirus, pero está a la vista su pérdida de fuerza en el Ecuador. Opositores que amenazan paros y proponen destituciones son ciegos de espíritu al no dar importancia a este paso fundamental.