Erosión regresiva del río Coca, incontenible

Fotografía cedida por Petroecuador que muestra una zona erosionada por la cuenca del río Colca hoy, a la altura de la localidad de Francisco de Orellana (Ecuador). EFE/ Archivo

Nuevamente causa preocupación la erosión regresiva del río Coca, en la provincia del Napo, pues amenaza con llevarse una parte de la vía Baeza – Lago Agrio.

Se trabaja para evitar que esta vez también se afecte a los tres oleoductos que tiene el país.

Según informó el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, se incrementan las fisuras en la vía en el sector Río Piedra Fina 2, en el kilómetro 10, por efectos de la erosión regresiva, por lo que se decidió suspender el paso vehicular por la vía Baeza – Lago Agrio de manera indefinida, la ruta alterna es: Y de Baeza – Narupa Loreto – Coca.

Ante este nuevo avance del fenómeno natural, también se tomaron acciones con la infraestructura hidrocarburífera, Petroecuador anunció el monitoreo constante del Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) y del Poliducto Sushufindi – Quito.

Por su parte la empresa privada OCP inició acciones más agresivas para evitar el daño a su infraestructura, sobre todo para no permitir que la exportación o recepción normal del petróleo ecuatoriano se vea afectada.

“En respuesta inmediata, OCP Ecuador inició labores preventivas que incluyen un monitoreo 24 horas in situ. De igual manera, arrancó con la construcción del bypass temporal que tendrá 300 metros de largo y se estima estará concluido en 15 días”, informó Roberto Grijalva, gerente de Operaciones de la compañía.

La erosión regresiva del río Coca inició en febrero del año pasado, con la desaparición de la cascada de San Rafael, la que hasta entonces era la más grande del país, y la posterior destrucción en abril de los tres oleoductos del Ecuador; desde entonces la OCP ha construido ocho bypasses temporales, dos variantes definitivas y una variante adicional que está en construcción.

La mayor preocupa ción es por la rapidez con la que la erosión se acerca a la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, la más grande del país, que provee del 30 % de la electricidad y que le costó al Ecuador USD 2 millones 600 mil. Actualmente el fenómeno natural se encuentra a poco más de 7 kilómetros de esta obra. (I)