306 personas leyeron versos en la maratón poética para los ríos de Cuenca

Docenas de personas se volcaron a las orillas a leer poesía. Xavier Caivinagua/El Mercurio

Expresen sus sentimientos, tomen un libro, lean un verso. Con esas palabras, docenas de jóvenes, que se volcaron ayer a los ríos de Cuenca, intentaron atraer a los transeúntes que estuvieron cerca de las riberas y de los parques lineales para que leyeran poesía.

Para ello, estudiantes de la carrera de psicología, impulsados por Eloy Alfaro, docente de la materia de antropología, se tomaron cuatro espacios: las inmediaciones del puente que une la Universidad de Cuenca con El Vado, las escalinatas, la Casa del Artista y la Quinta Bolívar.

La idea, que surgió a finales de diciembre de 2020 y se cristalizó por primera vez en enero de 2021, era que cualquier persona le dedicara un poema, un verso, un párrafo a los ríos que se cruzan por la ciudad.

Hace un año ya hubo una primera edición en la que estudiantes y colectivos se reunieron en las orillas de los ríos para leer o declamar. A esto lo llamaron el “Maratón de lectura de poesía a los cuatro ríos de Cuenca”.

No obstante, en este 2022, en una segunda edición, el objetivo fue reunir a la mayor cantidad de gente posible para establecer un récord: cuatro horas de lectura ininterrumpida en la ciudad.

“Nos movimos mucho para convocar a la gente, para que venga, para que lea. Podían traer sus libros o nosotros les dábamos porque conseguimos donaciones de instituciones públicas y privadas”, dijo Catherine Robles, integrante del equipo de organización del evento.

La convocatoria llegó a varios espacios, incluso a Quito, desde donde se donaron libros y vinieron estudiantes de la Universidad Central para ser parte del maratón poético.

El objetivo del evento fue que el mayor número de personas lea poesía a los ríos de Cuenca. Xavier Caivinagua/EL Mercurio

Animar al público

Los cuatro espacios escogidos para el evento se activaron a las diez de la mañana. Distintos grupos, cada una con su propia temática, se acomodaron para exhibir las obras de autores ecuatorianos y extranjeros, y para invitar a los transeúntes que, un principio, se acercaron con temor.

“Siempre hay ese miedo al micrófono, a leer, a participar, pero por eso estamos acá para que quitar ese temor de que seas parte de la lectura de la poesía”, dijo Santiago Gordón, estudiante de la Universidad de Cuenca.

Santiago fue el animador en la Casa del Artista. Además de invitar a la gente que pasaba por allí para que lea poesía, también se acercó a los transeúntes y les mostró libros y los invitó a participar del evento.

Poco a poco, en los espacios la gente se animó a leer poesía para los ríos de Cuenca, para que, en las cuatro horas que duró la maratón, 306 personas participen en total.

ara las lecturas se consiguieron varias donaciones de obras. Xavier Caivinagua/El Mercurio

“Es un lindo evento que no debería reducirse a realizarse solo una vez al año. Creo que si entre todos nos interesamos se podría promover la lectura no solo de poesía sino de otras temáticas por lo menos una vez al mes”, opinó Maritza Peña, quien recorrió el Paseo 3 de Noviembre para visitar los espacios de lectura.

Si bien la maratón poética ha sido pensada para que se realice una vez al año, la idea de los organizadores es que el evento logre una mayor cobertura a través de la participación de distintos grupos e instituciones.

Por eso es que se espera que el 2023 haya una nueva edición, ya que hay un público lector y hay estudiantes que están dispuestos a continuar ayudando a que el evento se siga desarrollando.

“Creo que si esto se sigue haciendo con más frecuencia, si los estudiantes seguimos apoyando, esto podrá ser un evento en donde muchas personas puedan participar y leer”, dijo María Gracia González, estudiante de psicología. (I)