Al parecer el sistema atraviesa un serio problema, ya que en ocasiones se culpa a la Academia que sus investigaciones se encuentran desvinculadas de la sociedad, y, por otro, los políticos al momento de tomar sus decisiones, prefieren priorizan el cálculo electoral que, las decisiones que tienen sustento científico.
Por ello, no sorprende que, en países en vías de desarrollo, muchas regulaciones que en Europa o Estados Unidos, tardaron largos años para su construcción, en nuestros Estados se legisle de manera automática. Sin embargo, el problema se basa en la forma cómo fue construida la normativa. Pues en lugar de hacerlo a través de evidencia que permita dar solución a los males que aqueja la población o el ecosistema, se lo hace a través de la copia o inspiración en normativa extranjera, la cual obedece a otra realidad, y en consecuencia la búsqueda del deber ser, y el ser, nunca dejan de brindar una respuesta positiva.
Frente a este particular, desde la década de los noventa del siglo pasado, el Reino Unido conceptualizó la “Evidence Based Public Policies” (EBPP), la cual sugiere que la toma de decisiones para la implementación de las políticas públicas, se la haga a través de la evidencia generada por la investigación científica de calidad. Con lo cual, se podría entender que el riesgo asociado al gasto económico, o a los impactos sociales o ambientales, disminuye por el trabajo previo realizado.
El soporte se fundamenta así en que, el proceso de formulación e implementación de las políticas públicas, sea a través de evidencia científica. Lo cual se resume en que las EBPP, brindan más información de calidad (investigación rigurosa), con el propósito de tomar decisiones.
Lo más importante, es establecer que para aplicar la metodologìa, se debe observar: a) criterios para identificar evidencia útil, y, b) incorporación de la evidencia en la formulación de las políticas públicas.
Esta es la teoría, pero que difícil es llevar esto a la práctica y lograr que los políticos generen puentes con la Academia, con el propósito de utilizar sus resultados de investigación para incorporarlos a la toma de decisiones por el bien de la comunidad. (O)
