El retorno a las aulas de todos los estudiantes se completa desde hoy en el país; sin duda, un gran paso.
La decisión en ese sentido la tomó, semanas atrás, el Ministerio de Educación en base al casi ya completo proceso de vacunación contra el Covid-19 entre el estudiantado.
El rango de contagios se ha reducido en todos los segmentos de la población.
Dentro de poco tiempo en Ecuador podría considerarse a la pandemia en fase endémica. Corresponderá al Ministerio de Salud Pública hacer este anuncio, considerando los informes epidemiológicos de rigor.
Hasta la semana anterior funcionó el sistema híbrido; es decir, unos alumnos asistían a las aulas; otros seguían en la virtualidad. La presencialidad no fue obligatoria, excepto para los maestros.
El gobierno siempre apuntó en esa dirección desde comienzos de 2022. La detuvo un breve repunte de la enfermedad tras el feriado por Navidad y Fin de Año. Organismos internacionales también recomendaron el regreso total. Lo consideraron necesario y urgente.
No se ha informado de rebrotes entre quienes ya asisten a las aulas. Esto confirmaría la tesis de las autoridades educativas y de salud: los estudiantes están seguros, siempre y cuando se tomen las debidas precauciones, mucho más por la inmunización en sus diferentes etapas.
Pero más allá del regreso presencial viene un duro trabajo para los maestros: empeñarse en nivelar conocimientos entre sus alumnos; pues, los desajustes son evidentes tras dos años de clases virtuales, con altibajos, limitaciones pedagógicas y tecnológicas, amén de la deserción de miles de estudiantes, sobre todo de las áreas urbano-marginales y las rurales.
No podrá recuperarse el tiempo perdido. La calidad educativa sufrió un retroceso. De alguna forma, el retorno implicará el renacer de la interrelación entre profesores y alumnos, y la de estos entre sí, básica en el proceso educativo.
Para los estudiantes también retornan hábitos como los de madrugar más temprano; igual para los padres de familia, cuya responsabilidad es seguir coadyuvando para la formación integral de sus hijos.
