Modelo político caduco

Hernán Abad Rodas

Es tan grave la crisis política, ética y moral en la vivimos inmersos, que conceptos y palabras nobles como: verdad, libertad, justicia, independencia, paz, democracia, revolución, etc. actualmente son irresponsablemente utilizadas para camuflar la mentira y enaltecer las bajas pasiones, como: la vanidad, el orgullo, la codicia, el abuso del poder, la impunidad etc.

Supuestos izquierdistas que hablan de los pobres, pero viven como ricos, que viajan por el mundo en aviones privados, a vista y paciencia de los ingenuos; y que hoy justifican la invasión a Ucrania. Para unos casos, defienden la libre determinación de los pueblos y rechazan la injerencia y los bloqueos, pero para otros valen los atropellos e invasión de Rusia. El “Socialismo del siglo XXI”, ese modelo POLÍTICO CADUCO e ineficiente, que no soluciona los problemas de la gente, se replica en países que han fracasado y llevado a la pobreza y a la miseria a la gran mayoría de sus ciudadanos, salvo a los que disfrutan del poder desde los comités centrales del gobierno único (Cuba, Venezuela y Nicaragua).Basta revisar a los países antes mencionados, los pésimos indicadores económicos, sociales, de desarrollo humano, la falta de transparencia, en contraste con los altos niveles de corrupción, persecución, violación de las libertades y DD.HH., incluso vínculos con el narcotráfico.

En el caso de nuestro Ecuador hay quienes pretender dar lecciones de moral luego de haber protagonizado un gobierno lleno de corrupción, despilfarro, autoritarismo, abusos de poder durante una década y hoy añoran volver como si nada hubiera pasado, y para ello lideran una acción desestabilizadora para tomarse los órganos de control, buscar impunidad y revisión de las sentencias condenatorias por delincuencia organizada e irregularidades comprobadas en procesos judiciales.

El mundo entero está escandalizado por el ocaso de la verdad. A la mayoría no le interesa y los malvados aprovechan de las circunstancias para equiparar la verdad con la mentira, para crear verdades paralelas, verdades oficiales, verdades relativas.

La justicia es la única libertad que existe en el mundo, porque eleva hasta tal punto el espíritu, que las leyes de los hombres y los fenómenos de la naturaleza no pueden alterar su curso.

Para poder funcionar en un sistema de derecho, son necesarias cualidades morales, incompatibles con el insulto y la manipulación de la justicia; la misma que en nuestro país continúa en cautiverio del poder político. (O)