Revocatoria

José Chalco Salgado josechalcosalgado@gmail.com

            Para revocar el mandato hay que entender a la institución. Para iniciar un proceso de revocatoria se debe comprender a detalle su naturaleza y razón más allá del mediático show y las opiniones de distinto color.

La revocatoria de mandato a las autoridades de elección popular, tiene su origen en prácticas naturales de la sociedad que datan desde la Antigüedad Grecolatina. En aquella época el tiranicidio se legitimó.

            En la Edad Media surge el derecho a la resistencia como expresión de la organización social para no acatar las decisiones ilegales o arbitrarias emanadas por parte de los gobernantes. En el siglo XVIII la subversión y reconocimiento del ejercicio de los derechos de los ciudadanos, es legitimado, toma sentido y permanente forma jurídica.

            La Declaración de Independencia de los Estados Unidos del año de 1777 dice: “(…) los gobiernos han sido establecidos entre los hombres para garantizar sus derechos, su justo poder emana del consentimiento de los gobernados. Cada vez que una forma de gobierno se torna destructiva de ese objetivo, el pueblo tiene el derecho de cambiarla o de abolirla y establecer un nuevo gobierno.”.

            Es precisamente ésta, la premisa que entrega sentido y forma a la construcción constitucional del recall o revocatoria del mandato. Desde la comprensión de la teoría del poder, es la facultad con la que cuenta la fuente de poder -población- para retirar el atributo de gobernante a quien se ha apartado del cumplimiento de su encargo. ¿Virtudes? Varias. Una mayor conciencia ciudadana de los derechos electorales y participación en la vida política; viabiliza un ejercicio permanente de responsabilidad y rendición de cuentas; legitima la representación y entrega cuerpo a la representación política.

            ¿Problemas? También varios. Dificultad para definir el espacio de control de la población al mandato político existente entre representados y representantes; incertidumbre política y un alto riesgo a una politización con el proceso de revocatoria. Así es. Ahora es su turno. Decida y genere su criterio propio sobre el proceso iniciado en contra del presidente Lasso. El mío, en un futuro artículo le contaré. (O)