Unidad renal reclama pagos por prestación de servicios

Aunque la institución no ha pensado suspender sus servicios, indica que la situación cada vez es más insostenible.

La Unidad de Servicios Renales del Austro (UNIREAS) atiende con normalidad a sus pacientes estos días. Xavier Caivinagua/El Mercurio

María Pérez, de 46 años, estuvo ayer en la Unidad de Servicios Renales del Austro (UNIREAS). La paciente, derivada del hospital Vicente Corral Moscoso, tiene insuficiencia renal, enfermedad que adquirió a los 37 años debido a la presión alta.

Mientras espera sentada su turno, cuenta que acude a las sesiones de hemodiálisis tres veces a la semana. Cada una dura cuatro horas. “Vivo en Paute, por lo que vengo a Cuenca pasando un día para purificarme la sangre…Es un procedimiento muy duro, la presión se me baja cuando estoy por terminar mi tratamiento, siento angustia, desesperación…”, detalla.

A María no le importa viajar dos horas de ida y dos de vuelta para realizarse este tratamiento. Asegura que cualquier esfuerzo vale la pena para disfrutar cada día de su familia, especialmente de su última hija menor que cumplió seis años, a quien la tuvo mientras asistía a los tratamientos.

Como María, decenas de pacientes reciben atención gratuita tras ser derivados de la Red Pública Integral de Salud a UNIREAS, a la que el gobierno adeuda pagos por la prestación de servicios externos de diálisis.

Por esa razón, la madre de familia confiesa que siente miedo de que ya no pueda recibir atención médica.

Jorge Pérez, quien se hace tratar en esta Unidad desde hace 12 años, también expresó su sentir: “Estamos preocupados porque conocemos que el Gobierno no viene cumpliendo sus pagos”.

El maestro jubilado recordó que el año anterior también levantaron su voz de protesta ante una situación similar. “Los únicos perjudicados seríamos nosotros, ya que las consecuencias serían fatales si dejamos de recibir estos servicios”, agregó.

Pérez cuenta que sufre de insuficiencia renal, a raíz de una diabetes adquirida a los 25 años de edad (actualmente tiene 59) que no la pudo controlar.

Por tal motivo se somete a hemodiálisis los martes, jueves y sábados, sesiones que también duran cuatro horas. “Los primeros pinchazos son dolorosos, pero me he ido acostumbrando con el tiempo porque quiero seguir viviendo”, cuenta.

Aunque la institución reclama los pagos al Gobierno, no ha contemplado, por ahora, dejar de atender a los pacientes, explica Augusto Vázquez, gerente de UNIREAS. “Una interrupción sería gravísimo al tratarse de pacientes con enfermedades terminales”, acotó.

Deudas

Vázquez asegura que la situación es crítica, a tal punto que actualmente cuentan con insumos solamente para 10 días. “Llegará algún momento que ya no seremos sujetos de crédito y tendremos que decir hasta ahí llegamos, pero no queremos que eso llegue a suceder, tengo confianza en el Gobierno”, añadió.

Augusto Vázquez, gerente de UNIREAS, dio a conocer los valores que les adeudan. Xavier Caivinagua/El Mercurio

El especialista detalló que la deuda de las entidades estatales asciende a 1´718.128 dólares, de los que 1´156.000 corresponde al IESS.

En el 2021 la deuda llegó a 2´300.000 dólares, valor que ya fue se cancelado. “El más grande deudor antes era el Ministerio de Salud, pero ahora nos está pagando, sin embargo, aún nos debe cerca de 564.000 dólares desde marzo”.

Vázquez también criticó el sistema de pago centralizado que existe en el área salud. “Ahora resulta que se hace el trabajo en Cuenca, se aprueba en Cuenca, pero cancelan desde Quito, a quien ellos quieran y la cantidad que quieran”, cuestiona.

El gerente aseguró que efectuaron las gestiones debidas para el cobro de 300.000 dólares, pero apenas les cancelaron 1.400. “Hay un plazo para pagar de 90 días, pero estamos hablando de cuentas que no han pagado desde enero. Se saltan febrero, pagan marzo. No es coherente”, añade.

Los recursos económicos son indispensables para esta Unidad, según su gerente, considerando que los pacientes se hacen hemodiálisis tres veces por semana y diálisis peritoneal todos los días.

“Este problema no es solamente de UNIREAS, es de las clínicas y prestadoras externas. Hace pocos días, Solca anunció que iba a dejar de atender a los pacientes, por ejemplo, pero al final se llegó a un acuerdo”, recuerda.

La falta de dinero también ha frenado los trabajos que se desarrollan con el fin de ampliar la Unidad. “Aquí les brindamos el mejor servicio, pero el espacio está quedando corto”.

Diario El Mercurio buscó el pronunciamiento de la Dirección Provincial del IESS Azuay sobre este tema, pero no fue posible hasta el cierre de esta edición. (I)

LA CIFRA

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pacientes atiende la Unidad de Servicios Renales del Austro UNIREAS.