Hemos recibido la gratísima invitación para formar parte de un proyecto de lectura en la región norte del Ministerio de Educación Zona 6 Distrito Norte Cuenca, y a pesar del título tan enrevesadamente largo la propuesta es clara: una vez más el fomento de la lectura como eje principal del buen vivir; más allá de nuestra respuesta la iniciativa es válida y esperanzadora puesto que no se ha dejado de lado la importancia del libro, la literatura y sus autores; una vez más Sísifo y su piedra intentan subir la montaña (hoy más alta con la terrible globalización en la que el “conocimiento” la información en red, la cosificación del individuo, anulan todo razonamiento) y la llamada nos remitió a la memoria cuando intentamos, una y otra vez, sembrar semillas en tierra fértil. Los nombres de los amigos se han quedado en el tiempo pero hoy que, una vez más, el XIV Encuentro sobre Literatura de la Universidad de Cuenca calienta motores es indispensable reconocer los esfuerzos de las instituciones para seguir en la pasión lectora. Conversatorios, diálogos, mesas redondas, entrevistas, visitas a los colegios y escuelas, “citas con el autor” ponencias, presentaciones de libros, son algunas de las actividades que se suman a una realidad urgente en nuestro país. En su libro “De la Estupidez a la Locura” Umberto Eco afirma que la cultura “es la capacidad de desprenderse de lo que no es útil o necesario” es decir desprenderse de la desinformación global puesto que “es válido para la cultura, lo que es válido para nuestra vida individual” para ello está nuestra capacidad de filtro, de allí la importancia de seguir en el apoyo a estos esfuerzos. (O)
