Negra

Catalina Sojos

Hemos concluido una semana negra en la que el crimen de María Belén Bernal cubrió todos los espacios de la crónica roja y se evidenció (más todavía) la corrupción y ausencia de institucionalidad en los organismos de justicia, con un estado fallido incapaz de tomar decisiones responsables. Decimos semana negra porque el asesinato al Fiscal Edgar Escobar nos demuestra cómo el narcotráfico se ha declarado amo y señor de nuestra patria, lo cual, lleva a pensar en las condiciones psicológicas de terror que vive la ciudadanía que, cada día, soporta explosiones, crímenes y asaltos en una escalada sin final. La institución policial pulverizada gracias al teniente Cáceres que se mantiene fugado, la ausencia de herramientas tecnológicas que protejan a los ecuatorianos, las declaratorias de emergencia como mecanismo para liberar fondos económicos, hacen de este país un lugar peligroso para vivir. Incapaz, inoperante, abúlico y aburrido pudieran ser los adjetivos para calificar el desgobierno de Lasso, sin embargo, necesitamos despertar de esta somnolencia y exigir mayores respuestas a todos aquellos involucrados con el poder, puesto que son nuestros mandantes y servidores. Desde el punto más bajo de la moral, exigimos respuestas que evidencien su responsabilidad sobre lo que sucede en el día a día. Mientras tanto, insistimos en que únicamente la voz ciudadana, la solidaridad entre vecinos es fundamental para sobrevivir en este marasmo. (O)