Según proyecciones del Banco Mundial (BM), todos los países de América Latina recuperarán a finales de este año los niveles de sus economías de antes de la pandemia, excepto Ecuador, al cual lo logrará recién en el 2023.
Inicialmente, el organismo había previsto un crecimiento de la economía ecuatoriana de un 3,7 %. Sin embargo, lo ajustó hace pocos días y lo ubicó en 2,8 %; pero, según el Banco Central del Ecuador (Banco Central del Ecuador) será de 2,7 %.
Con el pronóstico para el 2022, sumado al 4,2 % que creció el Producto Interno Bruto (PIB) en el 2021, Ecuador se ubica en un 7 %, pero en el 2020 la caída fue del 7,6 %, es decir, no se llega a los niveles del 2019.
Con el 3 % que el BM calcula que crecerá el Ecuador para el 2023, el BCE lo ubica en el 3,1 %, el país recién recuperará los niveles de la prepandemia; pero eso, según el organismo, dependerá de factores externos, como la guerra entre Ucrania y Rusia, por lo que prevé un crecimiento económico de la región entre el 1,6 % y 2,5 % para la mayoría de los países.
Para Mauricio Pozo, exministro de Economía, en el lento crecimiento del Ecuador incide, en primer lugar, que el país entró a la pandemia con una crisis preexistente, con un fuerte déficit fiscal, sin reservas internacionales y sin ahorros fiscales, lo cual le impidió amortiguar la situación. Considera que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha ayudado, pero no fue suficiente.
“Mientras otros países tuvieron un rebote sobre el 10 % en el 2021, Ecuador apenas alcanzó el 4 %, ha sido una recuperación más lenta de lo que se esperaba y la expectativa de crecimiento del 2022 sigue siendo baja, para lo que el país requiere”, afirmó Pozo.
Para el experto, en la lenta recuperación tienen incidencia otros factores como la inestabilidad política y la poca capacidad del presidente Guillermo Lasso para hacer reformas legales que incentiven la producción, por su pugna con la Asamblea Nacional; la inversión extranjera que no llega; el riesgo país y la crisis internacional.
“La lectura de los mercados internacionales sobre la situación de Ecuador es la debilidad política del Gobierno, hasta ven riesgos de su permanencia, por eso no llega la inversión y el riesgo país se ha disparado”, afirmó
Pozo.2,8 por ciento crecerá la economía del país en el 2022 según el Banco Mundial, la cifra es insuficiente para volver a los niveles de la prepandemia.
Para el economista Santiago García, los factores internacionales, tomando en cuenta que la mitad del PIB del país proviene de sus exportaciones e importaciones, han sido un factor importante para lo ocurrido, pues la actividad económica global está muy baja y eso impacta al comercio y las inversiones; y todo indica que la situación económica de las potencias no va a mejorar en los próximos meses. Quito.- (ASM)-(I)
Gobierno sin horizonte
Para el analista económico Santiago García, el actual Gobierno no ha logrado establecer un horizonte de hacia dónde va la economía del país y tampoco ha presentado un plan, que sea creíble, de lo que se va a hacer, de aquí hasta el fin de su mandato, para incentivar el crecimiento económico y atraer la inversión, que es en lo primero que se debería centrar.
Además, el experto considera que se deben adoptar medidas específicas para reactivar la producción, entregar créditos de la banca pública para las actividades productivas y, sobre todo, aprobar una reforma laboral amplia, que por lo menos facilite la empleabilidad de jóvenes y mujeres.
“En materia laboral el Gobierno se perdió, no hay una política clara, a esto se suma que en la Asamblea difícilmente se aprobará una ley que facilite las contrataciones. Sin una reforma amplia en este aspecto, difícilmente crecerá la inversión”, afirmó García. (I)
