Camino al holocausto

Luis Muñoz Muñoz

Luis Muñoz

La extrema pobreza en la cual se desarrollan, niños y adolescentes es la primera causa, por lo cual este grupo vulnerable, han decidido delinquir y abandonarse al consumo de estupefacientes, pero también existe un altísimo grado de responsabilidad de sus padres, que no han controlado las actividades a las que se dedican sus hijos e ignoran por completo, que tipo de amistades tienen, ni que lugares frecuentan. Los menores necesitan ayuda psicológica, pero el estado no les brinda tal ayuda, en consecuencia, son presa fácil de la delincuencia y el microtráfico. En ese ambiente de pobreza y violencia, miles de infantes y adolescentes están creciendo y son vulnerables al reclutamiento de bandas delictivas. Solo, en lo que  va del año entre enero y octubre de 2022,  268 adolescentes han sido detenidos, 75  por tenencia ilegal de armas, que tendrían vínculos con pandillas. Así mismo se contabiliza de enero a octubre de 2022, 109 adolescentes, de entre 15 y 19 años, que fueron asesinados en nuestro País, sin contar que 27 niños, entre 5 y 14 años, fueron victimados como producto de una violencia no justificada lo que daría total alarmante entre jóvenes y niños asesinados como nunca antes en nuestra vida republicana. Eso demuestra la inseguridad social en el territorio nacional y que el Gobierno en forma deliberada ignora, aquello demuestra en forma concreta que las medidas que toma el Estado, para frenar la violencia son insuficientes y se está aplicando estrategias equivocadas. De otra parte, el delito de robo de enero a la fecha ha subido en un 32 % según las últimas estadísticas. Ya hemos manifestado en varias oportunidades,  que todos los males que nos afectan  responden a una estructura política caduca y  mal diseñada, por lo que nos mantenemos en el criterio que es necesario y urgente  cambiar la Constitución y las leyes diseñadas, elaboradas y aprobadas por una Asamblea Correísta, que puso en vigencia  deliberadamente tales leyes para buscar impunidad  de los «camaradas  revolucionarios» socialistas y comunistas frustrados de una izquierda desprestigiada y que cambio de modelo ideológico incluso en la misma Cuba y Rusia. Señor Presidente Lasso, escuche el clamor del pueblo y deje de Gobernar con la actual Constitución y las Leyes actuales, si no quiere terminar con la endeble democracia de nuestro País, de lo contrario todos terminaremos en el cadalso, pagando «justos por pecadores» y el mundo nos mirará absorto sucumbir. (O)