Ahora o nunca

David Samaniego Torres

Ecuador es capaz de proezas que bien pueden asombrar al mundo. Tenemos iniciativas, fuerza y decisión cuando nos proponemos en serio trabajar en un determinado aspecto. No lo hacemos todos los días, tampoco de manera personal, requerimos entender ciertas urgencias y necesitamos de líderes que nos indiquen caminos.

La participación de nuestra selección de fútbol, más allá de los resultados, nos deja acciones y motivaciones que vale la pena mencionarlas someramente.

La información y publicidad del evento han sido técnicamente planificadas logrando impactar positivamente.  Las canciones, los himnos, los símbolos patrios y deportivos han jugado un papel importante. Todos los componentes necesarios para tener un equipo que aspire a un campeonato mundial fueron estudiados y cuidadosamente ejecutados; toda la planificación y esfuerzos económicos hallaron en los futbolistas la voluntad de trabajar por el deporte y por la patria. Hubo una motivación, una planificación exigente, recursos humanos y económicos, es decir un qué y para qué que tuvieron oportunamente la respuesta requerida.

Ecuador requiere de una campaña similar para salir de los males que le aquejan, campaña consistente, de largo aliento, porque cuando las costumbres se enraízan, no pueden borrarse por decreto si son malas y tampoco crearse de igual manera las buenas, porque algo se vuelve costumbre cuando se lo practica o ejecuta reiteradamente por largo tiempo.   

Para no permitir que esta idea se hunda en el TOMEBAMBA estaría bien que el gobierno central la estudie y luego encuentre en la sociedad alguna agrupación cívica que permita construir un movimiento igual o superior que este que se vive en el deporte nacional.

Mi pedido a los ecuatorianos:  1) No dejemos que la situación de intranquilidad física y moral que vivimos se convierta en algo a lo que nos acostumbremos, es decir, a vivir en zozobra permanente creyendo que eso es normal y que así es la vida.  2) Demos nuestro mejor apoyo a quienes se decidan dirigir una campaña como la que menciono. 3) Seamos elementos entusiastas y muy activos para que estas o similares ideas se tornen en decisiones importantes para el futuro de Ecuador.

Querer es poder, quien bien comienza ya está a la mitad de la obra, sí se puede, obras son amores y no buenas razones, no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy, etcétera, son frases con historia que nos ayudarán a mantener nuestros propósitos. Sueño con un Ecuador en pie de lucha por su presente y futuro. (O)