La sanidad alemana aplaza operaciones por bajas médicas y falta de personal

Berlín.- Los hospitales alemanes han empezado a aplazar operaciones no urgentes debido al alto número de bajas por enfermedad entre los sanitarios y la falta de personal en el sector, mientras se alerta de la creciente agresividad que afrontan sus profesionales por parte de ciudadanos afectados.

La primera señal de alarma surgió a mediados de semana, al anunciar la clínica universitaria de la Charité de Berlín, uno de los mayores centros hospitalarios de Europa, de que hasta fin de año se suspendían las intervenciones no apremiantes.

La razón aducida fueron las numerosas bajas por enfermedad entre su personal sanitario, sin posibilidades de ser sustituidos puesto que no se dispone de tales relevos.

No es un problema específico de Berlín, sino que la situación se extiende por Baviera (sur) y Renania del Norte-Westfalia (oeste), los «Länder» más poblados del país, así como en las ciudades-estado de Bremen y Hamburgo (norte) o en Sajonia y Turingia (este).

Además, desde la Cruz Roja Alemana (DRK) se alertó este fin de semana de la agresividad que sufre el personal sanitario, especialmente en los servicios de emergencias o de pediatría, generada por la impaciencia o desesperación de los adultos para que se atienda a sus hijos.

«Son cada vez más frecuentes las amenazas y el paso de la crispación a la violencia física o psicológica», advirtió, en declaraciones al diario «Rheinische Post», la presidenta de la DRK, Gerda Hasselfeldt.

Son varios los factores que confluyen en esa situación: el alto número de bajas por gripe, coronavirus y otras enfermedades en las vías respiratorias, junto a las llamadas «emergencias habituales». A ello se une la falta de personal que sufren prácticamente todos los sectores de Alemania, no solo el sanitario.

En algunas regiones de Alemania no hay prácticamente camas libres en unidades de vigilancia intensiva en pediatría, de acuerdo con las informaciones de dicho rotativo.

Además, algunos medicamentos infantiles empezaron a escasear en las farmacias de la capital alemana, otros grandes núcleos urbanos o pequeñas poblaciones.

El problema son las cadenas de suministro, algo que afecta actualmente a otros países europeos, por lo que no es fácil tratar de reponerlos con otros medicamentos adquiridos fuera de Alemania, advierte la DRK.

UN MERCADO LABORAL EN BUSCA DE LOS MAYORES Y LOS EXTRACOMUNITARIOS

El ministro de Sanidad, el socialdemócrata Karl Lauterbach, anunció hace unas semanas un plan para «revolucionar» el sistema hospitalario alemán que, según admitió, está obsoleto y lastrado por una excesiva burocracia.

Los planes del ministro son, sin embargo, a medio plazo, para una situación denunciada como alarmante por sus profesionales.

«La falta de personal amenaza con frenar el crecimiento económico», admitió el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, el asimismo socialdemócrata Hubertus Heul, desde el dominical del popular diario «Bild».

El ministro invita ahí a las empresas a ofrecer empleo a las personas mayores de 60 años ya que, dice, el país «no puede permitirse» renunciar a su experiencia y cualificación laboral. La falta de personal es un lastre en muchos sectores esenciales de la primera potencia europea, desde técnicos a informáticos, sanitarios o hostelería.

Heil, sin embargo, no se plantea subir la edad de acceso a la jubilación, que actualmente está en los 66 años y que, de acuerdo a la reforma laboral aprobada en 2005, ascenderá gradualmente hasta los 67 años en 2030.

En busca de soluciones, el ministro de Trabajo presentó hace unas semanas las líneas marco de un futuro proyecto de ley para facilitar el acceso al mercado laboral de trabajadores extracomunitarios, incluso sin un contrato de trabajo, pero con conocimientos básicos de alemán.

Según estimaciones recientes de la Agencia Federal de Empleo, actualmente hay por cubrir siete millones de puestos de trabajo en distintos sectores. Alemania precisaría incorporar anualmente unos 400.000 trabajadores extracomunitarios o un total de 35 millones hasta 2035.

Todo ello, en medio de un mercado laboral teóricamente saneado. La tasa de desempleados en Alemania está en un 5,3 %, mientras que las cifras de ocupación están en máximos históricos, con 45,7 millones de personas laboralmente activas, en un país con 83 millones de habitantes. EFE