Cristina Fernández pide detención de miembros de grupo radical por amenazas

La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, solicitó la detención de tres miembros del grupo Revolución Federal, conocido por sus escraches contra el Gobierno y amenazas a la también expresidenta (2007-2015).

La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, solicitó este 28 de diciembre de 2022 la detención de tres miembros del grupo Revolución Federal, conocido por sus escraches contra el Gobierno y amenazas a la también expresidenta (2007-2015), debido a su presunta participación en un plan para atentar en su contra.

«De las conversaciones descubiertas entre estos integrantes de Revolución Federal (Jonathan Morel, Gastón Guerra y Leonardo Sosa) surge que planeaban juntar dinero para contratar un sicario… El dinero se encontró y el sicario está preso», aseveró Fernández a través de Twitter.

«‘¿Qué más necesitan Bruglia, Bertuzzi y Llorens (jueces de la Cámara Criminal y Correccional Federal) para unificar causas y detener a todos los responsables? ¿Que me maten? En ese caso ya todos sabrán que, además de quien empuñe el arma, habrá otros responsables», agregó la exmandataria, en relación a otra causa en la que se investiga el atentado que sufrió el pasado 1 de septiembre.

A principios de noviembre, la Cámara Criminal y Correccional Federal ordenó excarcelar a Morel, Sosa y Guerra, junto a otra mujer, Sabrina Basile, quienes habían sido arrestados, por decisión de un tribunal inferior, el 20 de octubre, por los presuntos delitos de incitación a la violencia y amenazas a políticos, entre ellos a la vicepresidenta.

La resolución que ordenó su liberación detalló que «no existen riesgos procesales» que permitan mantener su privación de libertad, reiterando que «no se verifica -de momento- la existencia de elementos objetivos» que permitan conectar esta investigación con la del atentado que sufrió Fernández en septiembre.

Más allá de estas excarcelaciones, los abogados de la vicepresidenta señalaron que existen «nuevos elementos que ameritan dictar la prisión preventiva de Morel, Sosa y Guerra», entre ellos una conversación entre Morel y Sosa, en la que se habló de hacer una «vaquita» (colecta) para contratar un sicario y matar a la vicepresidenta.

«¿Fue Sabag Montiel (principal sospechoso por el atentado del 1 de septiembre) el sicario de Revolución Federal? Todavía no lo sabemos, pero la conversación entre Sosa y Morel existe, y en la causa 2998/2022 varios testigos dijeron que Sabag Montiel sólo podría haber hecho lo que hizo por dinero», señaló el escrito presentado ante la Justicia.

«Estamos, lisa y llanamente, frente a un grupo que tiene mucho más poder y contactos de lo que parecía a primera vista, que ha dado una imagen engañosa en este proceso y que mantiene su objetivo de matar a Cristina Fernández de Kirchner», detalló el documento.

En una entrevista con EFE posterior al atentado, Morel aclaró que «nadie tiene que ir a matar a ningún político, no hay que gastar dos pesos en eso», aunque matizó que le «encantaría» que se «mueran los políticos», que les empiece a «agarrar una enfermedad».

Y negó haber tenido alguna relación con el ataque a Fernández además de conocer a alguno de los detenidos: «Yo solamente me expresé en contra del Gobierno. Si cuatro locos quisieron matar a alguien, que la Justicia actúe». EFE

Cristina Fernández pide detención de miembros de grupo radical por amenazas

Buenos Aires, 28 dic (EFE).- La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, solicitó este miércoles la detención de tres miembros del grupo Revolución Federal, conocido por sus escraches contra el Gobierno y amenazas a la también expresidenta (2007-2015), debido a su presunta participación en un plan para atentar en su contra.

«De las conversaciones descubiertas entre estos integrantes de Revolución Federal (Jonathan Morel, Gastón Guerra y Leonardo Sosa) surge que planeaban juntar dinero para contratar un sicario… El dinero se encontró y el sicario está preso», aseveró Fernández a través de Twitter.

«‘¿Qué más necesitan Bruglia, Bertuzzi y Llorens (jueces de la Cámara Criminal y Correccional Federal) para unificar causas y detener a todos los responsables? ¿Que me maten? En ese caso ya todos sabrán que, además de quien empuñe el arma, habrá otros responsables», agregó la exmandataria, en relación a otra causa en la que se investiga el atentado que sufrió el pasado 1 de septiembre.

A principios de noviembre, la Cámara Criminal y Correccional Federal ordenó excarcelar a Morel, Sosa y Guerra, junto a otra mujer, Sabrina Basile, quienes habían sido arrestados, por decisión de un tribunal inferior, el 20 de octubre, por los presuntos delitos de incitación a la violencia y amenazas a políticos, entre ellos a la vicepresidenta.

La resolución que ordenó su liberación detalló que «no existen riesgos procesales» que permitan mantener su privación de libertad, reiterando que «no se verifica -de momento- la existencia de elementos objetivos» que permitan conectar esta investigación con la del atentado que sufrió Fernández en septiembre.

Más allá de estas excarcelaciones, los abogados de la vicepresidenta señalaron que existen «nuevos elementos que ameritan dictar la prisión preventiva de Morel, Sosa y Guerra», entre ellos una conversación entre Morel y Sosa, en la que se habló de hacer una «vaquita» (colecta) para contratar un sicario y matar a la vicepresidenta.

«¿Fue Sabag Montiel (principal sospechoso por el atentado del 1 de septiembre) el sicario de Revolución Federal? Todavía no lo sabemos, pero la conversación entre Sosa y Morel existe, y en la causa 2998/2022 varios testigos dijeron que Sabag Montiel sólo podría haber hecho lo que hizo por dinero», señaló el escrito presentado ante la Justicia.

«Estamos, lisa y llanamente, frente a un grupo que tiene mucho más poder y contactos de lo que parecía a primera vista, que ha dado una imagen engañosa en este proceso y que mantiene su objetivo de matar a Cristina Fernández de Kirchner», detalló el documento.

En una entrevista con EFE posterior al atentado, Morel aclaró que «nadie tiene que ir a matar a ningún político, no hay que gastar dos pesos en eso», aunque matizó que le «encantaría» que se «mueran los políticos», que les empiece a «agarrar una enfermedad».

Y negó haber tenido alguna relación con el ataque a Fernández además de conocer a alguno de los detenidos: «Yo solamente me expresé en contra del Gobierno. Si cuatro locos quisieron matar a alguien, que la Justicia actúe». EFE