El presidente Lasso rechaza la queja indígena y llama a convivencia en paz

La Secretaría de Comunicación dio una actualización del estado de salud del presidente Guillermo Lasso, quien el último sábado fue ingresado al Hospital de Especialidades de las Fuerzas Armadas.

El Gobierno de Ecuador rechazó hoy el pronunciamiento de la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), que pidió la dimisión del presidente Guillermo Lasso y amenazó con protestas, e hizo un llamamiento a «la racionalidad, la convivencia pacífica y la unidad de propósitos».

El ministro de Gobierno, Henry Cucalón, en declaraciones reproducidas por su despacho, rechazó las declaraciones de líderes de la Conaie que han anunciado también la ruptura de un proceso de diálogo con el Ejecutivo ante una supuesta falta de interés político para resolver los problemas del país.

Cucalón aseguró que «en la vida real, este Gobierno está ejecutando los acuerdos alcanzados con las organizaciones del movimiento indígena y les está dando seguimiento», y estimó que el cumplimiento de los entendimientos alcanza un 90 por ciento.

El proceso de diálogo entre el movimiento indígena y el Ejecutivo arrancó en junio del año pasado luego de más de dos semanas de una fuerte protesta a nivel nacional.

Cucalón insistió en el cumplimiento de los acuerdos y se refirió a la entrega de presupuestos para la educación intercultural bilingüe, el proceso de creación de una universidad indígena, la reestructuración de créditos de campesinos y los avances en la discusión sobre la focalización de los subsidios a los precios de los combustibles.

Según el ministro, más bien hay la voluntad política del Gobierno de mejorar la calidad de vida de las poblaciones indígenas, lo que supone una marcada diferencia cuando se intenta imponer «la irracionalidad y la violencia».

Ante la amenaza de protestas contra el Gobierno, Cucalón anticipó que toda manifestación pacífica será «garantizada» por la autoridad y remarcó que el Gobierno no romperá el diálogo con ningún sector, sean indígenas, empresarios o políticos.

El Gobierno, dijo, «considera que el diálogo es un instrumento fundamental para la estabilidad y la prosperidad de todos», por lo que mantendrá abiertos los canales adecuados para conversar con los diferentes sectores.

Además, hizo un llamamiento para que «la racionalidad, la convivencia pacífica y la unidad de propósitos a favor del país sean los que primen».

Anoche, la Conaie, tras una reunión del Consejo Ampliado de su dirección, exigió la renuncia del presidente conservador Guillermo Lasso, y amenazó con convocar a protestas contra el Gobierno.

También pidió a la Asamblea Nacional (Parlamento) que inicie un juicio político de censura contra el mandatario ante los escándalos de supuesta corrupción que han salpicado a un círculo cercano a Lasso.

«Exigimos al presidente de la República del Ecuador, señor Guillermo Lasso, por dignidad de nuestro país, por su incapacidad de gobernar y resolver los problemas más sentidos de los ecuatorianos, presente su renuncia al país y dé un paso al costado», dijo el presidente de la Conaie, Leonidas Iza, en una declaración de prensa al concluir la cita de su movimiento.

Iza aseguró que el pueblo ecuatoriano se siente burlado por el Gobierno que, según dijo, no ha cumplido los acuerdos del diálogo y, más bien, ha profundizado las políticas neoliberales que detonaron las protestas de junio pasado.

Por ello, indicó que la Conaie ha decidido romper «este proceso de diálogo» y retirarse de las llamadas «mesas de seguimiento» de los acuerdos.

«Nos declaramos en movilización y asamblea permanente» y «radicalizamos la lucha en los territorios» de las comunidades, en defensa de las demandas que históricamente ha planteado el movimiento indígena por agua, tierra, empleo digno, salud, educación y defensa de los territorios de los pueblos originarios, apuntó Iza. EFE