En los últimos años, la medicina alternativa ha ganado terreno como una opción para quienes buscan una salud integral. Lejos de limitarse a tratar los síntomas o las dolencias, esta práctica se enfoca en la totalidad del ser humano, esto es, lograr un equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu.
En las terapias que se aplican se emplean hierbas medicinales, se realizan limpias energéticas, sonoterapia o terapia del sonido, masaje energético, alimentación consciente, taita tabaco, baños de florecimiento y Reiki, entre otros métodos.
Estas son prácticas curativas milenarias, pero en la actualidad hay profesionales que se dedican a aplicarlas a diario.
Trabajo
Diego Pesántez Merchán, arquitecto de profesión y Heidi Cevallos, médica andina del Instituto ‘Jatun Yachay Wasi’, llevan 20 y 15 años, respectivamente, en el camino de la medicina ancestral al cual entraron por experiencias propias de enfermedades.
Para realizar este trabajo han cumplido con rituales e iniciaciones dirigidas por taitas, que poseen un profundo conocimiento de las tradiciones y las prácticas medicinales ancestrales, transmitidas de generación en generación.
“La estructura social de este tiempo ha alterado el orden natural de las personas. Ya no nos sanamos, nos curamos momentáneamente de un dolor. Pero nosotros tenemos el legado de volver a la sabiduría ancestral, actualizar el saber que hemos heredado”, expresó Pesántez.
Heidi explica que las personas acuden a terapia por diversas razones, porque no se encuentran bien en forma física y mental.
“Para la sabiduría ancestral la enfermedad nace desde lo emocional, por ello, aplicamos desde una regresión para observar al niño interno y ver qué ha dado lugar a cierta enfermedad en el adulto y por lo tanto ha cambiado el rumbo de la vida de esa persona”, indicó.
Necesidades
En este ámbito, las terapias se aplican de acuerdo con las necesidades de cada persona, por lo que su costo también varía según cada tratamiento. Aunque una limpia energética puede costar 10 dólares.
Heidi explica que el taita tabaco recibe la energía del cuerpo, elimina las energías de baja vibración y alivia el dolor. El huevo rastrea, absorbe la pesadez e inflamación de algunas partes del cuerpo, mientras que el sonido de los cuencos tibetanos, el tambor o la flauta cambia la vibración de las células. La digitopuntura alivia el dolor, que viene de experiencias pasadas.
“Es necesario cambiar la forma de pensamiento para regresar a la salud del cuerpo, de la mente y en lo emocional”, aseguró.
El Ministerio de Salud Pública (MSP) reconoce y respeta los saberes ancestrales. Desde 2020, está vigente el Código de Ética de la Medicina Ancestral, que resalta el conocimiento que hay en el territorio, mismo que es milenario y que se ha visibilizado.
La elaboración del documento Ética estuvo a cargo del taita Luis Enrique Cachiguango, originario de Imbabura. Para el sabio, el Código es la voz oficial de los hombres y mujeres de sabiduría.
Bioarquitectura
Diego Pesántez además ha combinado la sabiduría ancestral con su profesión de Arquitectura. En 2021 recibió la presea Patrimonio Cultural de la Humanidad, por sus técnicas constructivas tradicionales, usadas por más de 30 años en edificaciones del centro histórico de Cuenca.
Pesántez se describe como hijo de la Pachamama. “Diseñamos con el viento, con la montaña, con el agua, con el fuego, con la tierra misma”, expresa.
Para los sanadores es necesario volver los ojos a la tierra, cambiar la nutrición, el pensamiento, el sentir, para vivir en armonía entre el ser humano y la naturaleza. (PNH)-(I)
DATOS
- La medicina y la sabiduría ancestral se han transmitido por generaciones. La Constitución y el Ministerio de Salud Pública reconocen la práctica de la medicina andina.
- En las terapias alternativas se consideran aspectos emocionales, psicológicos, mentales, espirituales y el cuerpo físico para realizar la aplicación de terapias.
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