La declaratoria del Estado de Excepción por la pandemia del coronavirus, tuvo un impacto significativo en todos los sectores de la colectividad, especialmente en el ámbito laboral, puesto que muchas empresas optaron por cerrar o reducir su personal. Este hecho se vio reflejado también en la seguridad social.
De acuerdo a datos proporcionados por el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), en el Azuay, hasta enero de este año se registraban 184.490 afiliaciones, sin embargo, para noviembre la cifra si situó en 170.289, es decir, hubo una reducción de 14.201 afiliaciones, que representa un 9%.
En lo que corresponde a las afiliaciones voluntarias, existió un decremento crítico en mayo, con un 4,1% en comparación a las cifras de febrero (38.096), sin embargo, en octubre, se notó un crecimiento del 1.4 (38.638). Asimismo, en cuanto a afiliados con relación de dependencia, en julio se registró un decremento del 12.7% respecto a febrero (146.981), aunque la cifra para octubre creció en un 1.4% (130.394).
Los meses más críticos fueron mayo, junio y julio. Ya en Agosto, las cifras fueron nuevamente en ascendencia, lo que significa que el IESS recupera de a poco el flujo de aportes, tanto de afiliaciones voluntarias, como de dependientes del sector productivo.
“El IESS continúa con las campañas de afiliación porque el objetivo es dar los servicios, pero llegando a aquellos sectores que no tienen cobertura. También siempre hemos estado en contacto con gremios de artesanos, sectores artesanales, para hablarles de las ventajas que tiene la seguridad social y de esta manera poder seguir aumentando la base de afiliados”, mencionó Jorge Fernández de Córdova, director provincial del IESS en Azuay.
Fernández aseguró que, una vez que IESS ha sincerado sus cuentas, existe sostenibilidad suficiente para cubrir las prestaciones y pago de jubilaciones.
“No dejaremos de dar las prestaciones y las pensiones a quienes les corresponde. El IESS tiene sostenibilidad durante algunos años”, manifestó Fernández.
Nuevo director
Fernández asumió el cargo el pasado 4 de diciembre. El ciudadano ha laborado 30 años en el sector público y ha desarrollado algunos cargos dentro del IESS en años anteriores. Él asegura no tener ninguna filiación política y entre sus proyectos está la optimización de tiempos y servicios en cuanto a atención médica del IESS.
“Mi deseo y mi afán es mejorar los procesos que están imparches o corregir aquellos que están afectando, sobretodo en estos momentos de crisis sanitaria. Que en las diligencias que se observen en los prestadores internos o externos, sea la sociedad quienes nos ayuden a hacer la veeduría para ir mejorando”, sostuvo Fernández. (I)
