Desnutrición

Luis Ochoa Maldonado

Ocurre de cuando en vez desde el régimen, acordarse de la desnutrición infantil en el país, que alcanza a casi un tercio de niños menores de 5 años, en mayor proporción a nivel rural y urbano marginal, no es novedad, cuando estos sectores carecen de servicios de agua potable, alcantarillado, alimentación, educación, trabajo, cultura física, ambientes sanos etc. como un contexto para el subdesarrollo biológico sin atención de salud oportuna, a requerimientos de enfermos con infecciones y parásitos, que por más medicamentos que se entreguen, retornan a sus lugares de vivienda a ser presas fáciles de la enfermedad en un círculo vicioso.

Estos casos conocen a diario profesionales sanitarios del primer nivel, sin embargo, que siguen batallando en desigual lucha para superar estos estigmas, agravadas en crisis.

Insistir en un censo como en las cárceles, que siguen sin control. O más bien bajar a la base del sistema político en donde se presentan estas dificultades de vida, para que sean las comunidades las que empoderadas den respuestas a sus problemas, con conocimiento de causa y sustentando planes a largo plazo para superar estas taras de abandono social.

Si bien la desnutrición a nivel individual es un problema de emergencia médica, su sufrimiento es consecuencia de abandono general y multifactorial, que requiere ser enfrentada con decisión desde todos los frentes, pero sobre todo con una participación activa de las familias de los niños/as desnutridos/as.

Lo otro propio de un modelo concentrador excluyente en lo benéfico seguirá con foros para que se luzcan expositores, sobre un tema que no sospechan que se siente en la base del sistema.

A quienes van por las alcaldías y prefecturas por favor sentarse a observar las diferencias nutricionales de los sectores a los que van a representar, para que propongan planes serios de control de este mal que afecta a ecuatorianos, azuayos y cuencanos, de manera diferente.

Solo midan el peso y talla medias de niños de parroquias alejadas, cercanas y urbanas y se darán cuenta del riesgo de sufrir este mal. Tan diferente en cada tramo. Para no seguir engañándonos y engañando a los votantes. (O)