Adobe, un material que perdura en las construcciones cuencanas

Este material se ha ubicado dentro de las edificaciones prehispánicas en la mampostería, en el cielo raso y como paredes de soporte.

El adobe es utilizado en construcciones en Cuenca
Varias edificaciones de Cuenca están construidas a base de adobe. Foto XCA

El adobe es uno de los materiales clásicos en la arquitectura de las construcciones tradicionales de Cuenca, los beneficios de este material están en el bajo costo de fabricación, ahorro de energía, fácil integración al ecosistema, empleo de materiales y técnicas locales, además del fácil reciclaje de los excedentes en la construcción.

Álvaro Maldonado, uno de los arquitectos cuencanos que se especializa en la conservación, llegó a la conclusión de que, además de ser un material usado por sus ancestros, es muy fresco cuando hay calor y cálido cuando hace frío.

Fabricación adobe

Para fabricar un adobe se continúa utilizando las técnicas del pasado. Es decir se toma en cuenta el tipo de tierra –que no tenga mucha arcilla-, se utiliza moldes de madera y paja, que sirve como fibra para fortalecer la consistencia. Esto es conocido como ‘Low Tech’, una tecnología del pasado.

“El adobe es el atributo máximo de nuestra arquitectura. Todo se expresa con valores. Hay sentimentalismos en este material. Esto se mantiene vivo, a pesar de que aún no explotamos por completo la utilización del adobe”, destaca Maldonado, mientras supervisaba la restauración de una vivienda ubicada en la calle Larga, cerca del sector de Las Escalinatas.

La estructura de la iglesia de San Alfonso está hecha de adobe. Foto XCA

El profesional agrega que en Cuenca es posible replicar todos los trabajos en conservación, incluso en esta ciudad va ganando cuerpo la ilusión de construir netamente con adobe.

Asimismo, menciona que la tierra es un elemento natural y preciso. “Para que exista equilibrio dentro de la familia, en la vivienda deben estar todos los elementos como el agua, el fuego, el aire y la tierra. Pero sobre todo es una forma de construcción económica y amigable con el ambiente”.

Con su experiencia en conversación con adobe, Maldonado resalta que la importancia de mantener este material hace que se cree un sentido fuerte de identidad y sensibilidad. Asegura que es una forma de prolongar de algo que llena de historia un bien inmueble. Da importancia a la esencia y deja un legado a las futuras generaciones.

“Incluso esto mejora la calidad de vida. No tiene químicos. Tenemos muy de cerca esta tradición y es nuestra misión, como arquitectos, no dejar que se pierda esto”.

Costos

Cada adobe tiene un precio aproximado de 1 dólar, sin importar el tamaño. Se moldean de 55 centímetros por 25 cm, con un espesor de 14 cm. Hay otros de 40 cm por 20 cm y 20 cm de grosor. Estos últimos son prácticos para levantar paredes trabadas. La fabricación de este material se da con mayor fuerza en sectores como Susudel, Sinincay y Racar.

El rectángulo de adobe se moldea en tamaño entre 55 por 25 centímetros. Foto XCA

Maldonado hace referencia que por donde se pasa en Cuenca hay vivienda que se distinguen por su construcción con tierra. Entre ellas destaca la Escuela Central, en donde se ha realizado el mayor volumen de trabajo con adobe que se ha hecho en la ciudad. Se utilizó cerca de 1.000m3 de este material para su restauración, años atrás.

También se incluye la Catedral Vieja, que en su mayoría tiene adobe. Suma a esta lista, una vivienda ubicada en las calles Simón Bolívar y Luis Cordero, frente a la Gobernación del Azuay. Y también se encuentra el Museo de las Conceptas, La Antigua Casa del Sombrero, Casa de las Posadas y la Casa de las Palomas.

“Son cientos de edificaciones que mantienen esta esencia. El patrimonio hay que conservarlo, la tierra es económica y sirve para seguir con nuestra tradición. Mantener la esencia de nuestra ciudad es nuestra obligación”.