La política, que, a decir de Santiago Almeida, politólogo, significa en resumen servicio a la sociedad, en Ecuador se ha convertido en sinónimo de corrupción, deshonestidad, inmoralidad y negligencia.
Según Almeida, esto no es nuevo, pues en este país ocurre por lo menos en los últimos 50 años. “Pero yo diría que en la última década esta percepción ciudadana se amplificó de manera fenomenal…”.
Para él esto se debe a tres factores principales: a la mayor inclusión de la población en temas políticos; al incremento de cobertura de internet; y al desarrollo acelerado de canales de comunicación: redes sociales.
“Ahora cuando aparece un mensaje o una denuncia en contra o a favor de alguien que aspire a llegar a la política enseguida se replica y se viraliza, y en algunos casos hasta se posiciona…”, señaló.
Acotó que, en redes sociales, especialmente Facebook y Twitter, se ha vuelto un fenómeno social ironizar y hacer humor de la política, principalmente, por medio de memes, gifs y videos.
Y precisamente estos tres formatos están entre los más utilizados en las nuevas plataformas de comunicación, en las que se incluye también a Instagram, de acuerdo con Marco Campoverde, diseñador.
“El uso común y creciente de estos recursos obedece a su sencillez técnica, pues no requiere de mayor experticia para manejarlos y estos recursos vuelven más atractivas las redes para los seguidores…”, añadió.
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Campoverde indicó que por ejemplo Internet ofrece gran facilidad para producir, grabar, editar y difundir un video, que es uno de los elementos de comunicación más potentes en la red.
“También se debe tomar en cuenta que las redes dan la posibilidad de hacer uso de una mala práctica llamada descontextualización, y también de montajes y mensajes distorsionados…”, advirtió.
Para Sofía Arce, psicóloga, los humanos perciben un valor o condición más que otro cuando esto es negativo. “Tenemos en nuestra mente el mensaje de que la sociedad está en decadencia…”, puntualizó.
Además, para Arce la humanidad está atravesando un momento histórico como la pandemia de la Covid-19, que provoca impactos emocionales profundos y traumáticos.
“Una de las palabras más desgastadas actualmente es la palabra política, porque se la relaciona con la corrupción, con el chantaje, con el reparto, incluso con la delincuencia organizada…”, manifestó.
Arce considera que es necesario que el ser humano sepa que toda sociedad evoluciona, pues está conformada por seres vivos, inteligentes y libres, que pueden cambiar sus condiciones. (CSM)-(I)
PERCEPCIÓN
Para Mauricio Molina, sociólogo y activista social, a algunos políticos les conviene que se vea a la política como sinónimo de corrupción, pues esto les permite aparecer como los “grandes salvadores”.
“A otros políticos en cambio les beneficia porque de se valen de esto para mostrarse como perseguidos, como personas que hicieron el bien y que por eso ahora les persiguen…”, añadió.
A decir de Molina es deber del Estado incentivar a que la población tenga un pensamiento crítico y no vaya a las urnas únicamente para obtener el certificado de votación sino para elegir el destino del país.
Molina igualmente considera que es necesario un mayor compromiso del Consejo Nacional Electoral (CNE) para apoyar y asesorar a la ciudadanía sobre el derecho que tiene a revocar el cargo a quien no cumpla.
