Brindis virtual por el futuro

Gerardo Maldonado Zeas

Un acuerdo forzado entre Diana Atamaint y Arturo Cabrera del CNE y TCE, pone fin a una serie de disputas que el invento maléfico del Código de la Democracia permitió a  quienes quieren hacer tabla rasa del concepto de participación en las elecciones, sea manoseado para sus intereses.

Una reacción contundente de la ciudadanía limpia, de la gente honesta de este país, condenando las intromisiones dudosas de parte y parte en este conflicto electoral, forzó a dos apadrinados del correismo llegar a acuerdos tibios, para “acceder” a que las elecciones se realicen en la fecha prevista, y se deje para la historia la inscripción de Alvaro Noboa, quien comprando un partido político pretendió ser candidato a la presidencia, burlando todos los reglamentos y disposiciones electorales.

Y con esto, se quedaron con la bata puesta, la inefable Sylka Sánchez, esposa de Cornejo el binomio de Noboa, y sobretodo cierta rama de los comprados por Corrrea, que ahora fungen de candidatos en la también alquilada lista 1 del bailarín Jairala.

Una vergüenza para el Ecuador haber vivido este pasaje negro de la historia, en el cual algunos hijos de vecina, sin nombre, experiencia, condición y honestidad se han inscrito para terciar en las elecciones, solamente para recibir el dinero público que se les asignará, es decir para ir por la plata y la firma de “recibido” y así ufanarse de haber sido candidatos a la presidencia. Una trama convertida en una distracción para mantener a la gente ocupada en todo, menos en pensar cómo salir de esta crisis brutal, consecuencia de un año fatídico, sobre todo para los más vulnerables.

Pasamos una Navidad en el encierro, conversando con familiares y amigos de manera virtual, recordando con tristeza todo lo ocurrido este 2020 de ingrata recordación, y brindando porque el año 2021 sea venturoso, menos conflictivo, pero dándonos cuenta también de la pobre concepción política de personas de no creer, invocando un mínimo de análisis para no dejar al Ecuador en manos de improvisados, payasos o demagogos. (O)