En el 2020, la Iniciativa de Transformación de la Movilidad Urbana escogió a Cuenca para desarrollar un plan de movilidad sostenible. Su objetivo: promover la reducción de los gases contaminantes que emana el transporte privado.
Tras dos años en los que se levantaron estudios y se desarrollaron talleres con los distintos actores relacionados con la movilidad de Cuenca, ayer arrancó el primer programa piloto para poner a prueba el plan que se armó para la ciudad.
Este primer programa piloto estará enfocado en incentivar el uso de la bicicleta eléctrica entre instituciones públicas, privadas y educativas.
Para ello, la Universidad del Azuay adquirió bicicletas eléctricas que serán repartidas entre las entidades que formarán parte del programa piloto. Entre estas están: la Universidad de Cuenca, la Universidad Politécnica Salesiana, la EMOV y la Dirección de Gestión de Movilidad municipal.
La idea es que las personas que por lo general usan su vehículo privado para movilizarse lo cambien por una bicicleta eléctrica.
¿Por qué una bicicleta eléctrica?
De acuerdo a los análisis que realizaron las instituciones detrás del plan de movilidad, en ocasiones la gente no quiere transportarse en su bicicleta por la geografía de Cuenca.
Ante ese limitante, Mateo Coello, vicedirector de Departamento de Posgrados de la UDA, cree que la bicicleta eléctrica puede ayudar a cambiar los hábitos de la población cuencana.
“Con bicicleta convencional, mecánica, se podría superar la geografía que tiene la ciudad. Sin embargo, el uso de la bici eléctrica pasa por un tema de inclusión. Hay personas que tal vez no tienen el físico necesario. Entonces eso aporta la bicicleta eléctrica, salvaguardar las dificultades geográficas”, dijo Coello a diario El Mercurio.
A lo largo de enero, en su día a día, los trabajadores de las instituciones participantes experimentarán el uso de la bicicleta eléctrica.
Una vez que termine el programa piloto se recogerán las opiniones de quienes participaron para armar una campaña que motive a cambiar los hábitos de transporte dentro de la ciudad.
“El plan piloto nos dará luces para articular las verdaderas necesidades que tiene la población y hacer una transición, principalmente del vehículo privado a usar la movilidad sostenible, en particular la bicicleta”, explicó Guilherme Chalhoub, subgerente de movilidad sostenible de la EMOV.
Presentación del plan
Iniciado el programa piloto, las instituciones que elaboraron el plan de movilidad sostenible para Cuenca se aprestan a presentarlo, informó Diego Correa, quien preside la Dirección de Movilidad municipal.
Con la presentación se dará el paso a que más programas pilotos se desarrollen en Cuenca. La finalidad es probar las distintas opciones que ofrece la movilidad sostenible.
“Se ha armado este plan para que Cuenca no solo sea la capital de la electromovilidad del país, sino de Latinoamérica. A eso apuntamos con un plan construido por cuencanos y cuencanas, por la academia, por organizaciones públicas y privadas y de socios estratégicos”, dijo Correa. (I)
